El partido entre Barcelona y Las Palmas se juegó en el Camp Nou, a puertas cerradas, debido al clima social imperante que se vive en la ciudad debido al referéndum por la independencia política de Cataluña.
"El FC Barcelona condena las acciones llevadas a cabo hoy en muchas localidades de Cataluña para impedir el ejercicio del derecho democrático y la libre expresión de sus ciudadanos", reza el comunicado.
Y agrega: "Ante la excepcionalidad de estos hechos, la Junta Directiva ha decidido que el partido del primer equipo de fútbol de hoy contra Las Palmas se juegue a puerta cerrada, después de la negativa de la Liga de Fútbol Profesional a decretar el aplazamiento".
Antes de que se conociera la decisión, la grada de animación del Fondo Norte, impulsada por el propio club, envió un comunicado amenazando que en el caso de que se disputase el partido habría invasión de campo.
"Ante la indignante represión que está sufriendo el pueblo catalán, pedimos al FC Barcelona que suspenda el partido. En caso de que no lo haga, lo haremos nosotros. Hoy no se juega. Es por esto que hacemos un llamamiento al barcelonismo que vaya al Camp Nou y salte al campo del estadio en el minuto 1", rezaba el mensaje de la grada de animación.
Barcelona dio a conocer la decisión final 25 minutos antes del encuentro, mientras en los alrededores del Camp Nou varios centenares de aficionados esperaban para acceder al estadio.
Cuestionado por el intento de aplazar el partido, el presidente del conjunto catalán, Josep María Bartomeu, comentó que "hemos hablado con las instituciones y no ha habido manera de cancelar el partido y pasarlo a otro día. Así, decidimos jugar el partido y hacerlo a puerta cerrada para que se vea de esta manera nuestra disconformidad", añadiendo que "no se hace por seguridad el jugar a puerta cerrada, los mossos decían que estaba garantizada. Lo hacemos por los motivos excepcionales, no por seguridad. No jugar habrían sido seis puntos perdidos. Tres por no jugar y tres por sanción".
El vicepresidente institucional de Barcelona, Carles Vilarrubí, presentó su renuncia "indeclinable" en desacuerdo por la decisión del club de jugar a puertas cerradas el partido en el Camp Nou. Bartomeu aseguró: "Tendremos tiempo para hablar en los próximos días sobre este tema. Es normal que en una Junta no todos tengamos la misma opinión".
Durante la jornada de hoy, la ciudad de Barcelona está bajo un clima de tensión a raíz de llevarse a cabo el referéndum secesionista catalán, declarado ilegal por la Justicia española, razón por la que el Gobierno de Madrid desplegó a la Guardia Civil (fuerza de seguridad nacional), que reprimió a votantes con el resultado de al menos 338 heridos y contusos.
Cabe destacar que Las Palmas fijó posición sobre el tema al bordarse una bandera de España en su camiseta como apoyo a la unidad del país y de rechazo a la independencia de Cataluña.