El papa Francisco reconoció que tiene "miedo de ser malinterpretado" en las entrevistas, al tiempo que se calificó como "tímido" y recordó que en Buenos Aires "tenía un poco de temor a los periodistas".
"Soy descarado, pero también un poco tímido. En Buenos Aires tenía un poco de temor de los periodistas, pensaba que podían meterme en dificultades y por eso no daba entrevistas", reconoció el Pontífice en un texto publicado en el libro "Adesso fate le vostre domande" ("Ahora hagan sus preguntas"), que reúne sus entrevistas en los aviones papales.
"Todavía tengo miedo de ser malinterpretado, pero quiero correr ese riesgo pastoral"; agregó Jorge Bergoglio en la obra co-escrita junto al jesuita Antonio Spadaro, editado en italiano por Rizzoli.
Además, resaltó que a veces los periodistas hacen las preguntas de la gente. "Y una cosa con la que me siento bien es hablar con pequeñas revistas y diarios populares", agregó.
"Busco responder de modo espontáneo, en una conversación que quiero que sea comprensible, y no con fórmulas rígidas. Uso un lenguaje simple, popular", planteó Bergoglio.