Hacer dieta y practicar ejercicio con regularidad deberían ser las indicaciones adecuadas para mantenerte en forma y no subir de peso. Sin embargo, la ciencia reveló que existen otros factores externos que pueden interferir en dicha cuestión y que nadie, hasta este momento, se imaginaba.
Los científicos sostienen que algunos químicos,conocidos como sustancias de perfluoroalquilo (PFAS), usados en envoltorios de alimentos, sartenes con coberturas antiadherentes y algunas prendas de ropa pueden disparar el peso corporal al interferir en el metabolismo, especialmente de las mujeres.
“Por primera vez, nuestros descubrimientos señalaron un nuevo camino en el cual los PFAS pueden estar interfiriendo con la regulación del peso corporal en los humanos y contribuyendo, por tanto, a la epidemia de obesidad’, dijo el autor principal del estudio Qi Sun, profesor del departamento de Nutrición en la Universidad de Harvard.
Los investigadores han encontrado que este tipo de químicos, también llamados ‘obesogenes’ por su interferencia con la regulación del peso corporal, están vinculados con un ritmo metabólico más lento en momentos de reposo.
“Generalmente pensamos en los PFAS en términos de problemas de salud como el cáncer, pero parece que también juegan un papel en la obesidad, un problema de salud considerable que afecta a millones de personas’, explicó el coautor del estudio Philippe Grandjean, profesor de salud ambiental en Harvard.
En la investigación se analizaron los datos aportados por 621 personas con sobrepeso y obesidad que participaron en un ensayo clínico realizado a mediados de la década del 2000.El estudio revisó los efectos de cuatro dietas para perder peso, pero saludables para el corazón, por un periodo de dos años. A los participantes también se les midieron sus niveles de PFAS en la sangre.
“Aquellos que ganaron más peso después también tenían las mayores concentraciones de PFAS en la sangre, un vínculo que era más fuerte entre las mujeres”, sostiene el informe divulgado en la publicación PLOS Medicine.