Loris Karius fue el protagonista de dos errores insólitos durante la final que su equipo, el Liverpool, perdió por 3-1 ante Real Madrid. El joven de 24 años quedó en el ojo de la tormenta por dos intervenciones fallidas que favorecen triunfo de los dirigidos por Zinedine Zidane.
Según cuenta mdzol.com, el primero fue teniendo la pelota controlada, cuando quiso dársela con la mano a un compañero, pero Benzema, que estaba al lado suyo, interceptó la pelota y la mandó al fondo de la red para abrir el marcador.
El otro, que decidió el duelo, ocurrió cerca del final cuando Bale remató al arco de media distancia y el alemán falló en la contención. Puso los brazos casi sin fuerza y la pelota terminó venciendo su resistencia para convertirse en el 3-1.