Este sábado, José María Arancedo celebró su última misa oficial durante la solemnidad de Corpus Christi, la fiesta de la Eucaristía, muy cara a la fe católica.
Como todos los años, los fieles se congregaron a las 15 frente a la Catedral Metropolitana, en San Jerónimo y General López, donde se montó un altar. Desde allí, y pese al frío, el arzobispo de Santa Fe ofició su último acto litúrgico ante los feligreses.
El próximo sábado 9 de junio tomará posesión el sucesor de Arancedo, Sergio Fenoy. La ceremonia tendrá una particularidad histórica: se realizará en dos etapas. La primera, donde se mostrará el documento formal de su designación, se realizará a las 11 en la Catedral; y la segunda, pensada como misa multitudinaria, será a las 17, en la Basílica de Guadalupe.