En una conferencia de prensa que se realizó hoy en la ciudad de Rosario, encabezada por el ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro, el fiscal general de Santa Fe, Jorge Baclini, confirmó que la investigación que llevó adelante el Ministerio Público de la Acusación logró determinar que Ariel Máximo "Guille" Cantero fue el autor intelectual del ataque intimidatorio que tuvo como blanco al juez Ismael Manfrín, presidente del tribunal que condenó a los líderes de la banda Los Monos.
El funcionario confirmó que la serie de allanamientos que se llevaron adelante permitieron la detención de dos sujeto: uno de los autores materiales de la balacera contra dos viviendas que pertenecieron al magistrado, y otro que tenía en su poder un arma de fuego que coincidiría con la que se usó en los tiroteos que pusieron en vilo al Poder Judicial santafesino.
"Tras esta investigación que viene siendo puntillosa y muy detallada y también reservada, pudimos identificar al autor intelectual del hecho, la persona que habría dado la orden para que este hecho se materialice, y que está vinculado con la organización Los Monos, está detenido y es Ariel Máximo Cantero", reveló Baclini.
El pasado 29 de mayo una ráfaga de disparos impactó contra una casa ubicada en Italia al 2100, ubicada a metros de la seccional 5ª, y otra situación similar se registró en una vivienda ubicada en Montevideo al 1000, ambos habían sido lugares de residencia del juez Manfrín. Fue el primer ataque de una saga que culminó el sábado último con el atentado contra el Centro de Justicia Penal.
"La investigación sigue su curso, estamos investigando en detalle a personas que puedan ser autores intelectuales y que puedan no estar detenidas y también un grupo de personas que podrían ser autores materiales de otros ataques", comentó Baclini, y aclaró: "En principio lo que tenemos es en relación con el primer hecho", en referencia al atentado contra Manfrín.
Por otra parte, Baclini reveló que en los operativos que se realizaron desde que se registró el primer ataque -"unos cincuenta", según sus propias palabras- se secuestró un arma que se usó en el ataque contra la casa en la que vivía el inspector Ariel Lotito, quien llevó adelante pesquisas para detener a Los Monos, bajo las órdenes del juez Juan Carlos Vienna.