Luego de varios meses de ostracismo, Américo Rubén Gallego rompió el silencio y contó sus sensaciones tras su salida de Independiente, el 22 de abril último, y el posterior descenso del club al Torneo Nacional.

"Si seguía, Independiente no descendía. Mi equipo jugaba bien, entramos en una mala racha, pero sólo faltaban los goles. Contra Boca empatamos 1-1 y generamos 16 situaciones de gol. Vuelvo a decirlo, estoy seguro que conmigo no descendía, pero si me cabe un porcentaje de responsabilidad puedo hablar de un 30 por ciento. Me equivoqué al pensar que tenía un equipo como el de antes", destacó el Tolo.

Luego, agregó: "No pude conformar el equipo que siempre soñé. Pedí a Cauteruccio y me trajeron a Caicedo, también sufrimos muchas lesiones. Y a mi me faltó un poco más bancar a un mismo equipo, pero no lo hice porque tuvimos algunos partidos muy malo. Cuando uno pierde, siempre trata de hacer cambios. Creo que entre lo bueno está el hecho de que hice crecer  a muchos chicos".

Además, sobre el presidente Javier Cantero, explicó: "Él me dijo que estaba hasta el final conmigo y después me pidió la renuncia, yo le había dicho que si nos tocaba descender no tenía problemas en dirigir al equipo en el Torneo Nacional. Pero más allá de eso le agradezco porque me siguió pagando la deuda que tenían desde 2002".

"Ver a Independiente en la B parece un sueño, no termino de creerlo. Pero creo que están dadas las cosas para que vuelva rápido a Primera. Tiene un técnico que conoce bien la categoría", reconoció.

Para finalizar, destacó: "La gente de Independiente se ha portado muy bien. No fracasé en el club, es impresionante cómo me quiere la gente. Soy joven, tengo 58 años, y sé que en algún momento voy a volver".