El miércoles 13 de noviembre se cumplió el primer mes del crimen de Walter González Montaner, ocurrido dentro del bar Fiji, de la Recoleta Santafesina. El caso se encuentra todavía impune, porque los supuestos involucrados continúan prófugos; sin embargo, y para el desconsuelo de la familia de la víctima, el local recuperó la habilitación municipal y reabrió sus puertas esta madrugada.

“¿Quién fue el que los autorizó, quién fue el que levantó la clausura, quién lo habilitó de nuevo a ese bar?”, fueron algunas de las preguntas que se hizo Jimena, la hermana de Walter, que junto con sus padres Raúl y Luisa, expresaron toda su indignación para con quienes permitieron que esto suceda.

“Yo no puedo entender que después de lo que pasó sigan esperando que ocurra otra vez con otra persona. Yo a ese bar lo quiero cerrado, me dio bronca, me pregunté quién fue que lo autorizó. Hace un mes que mataron a mi hermano y está abierto con el mismo nombre”, cargó la joven, que también se pregunta “¿quién es el dueño del local?” y “¿cómo no rescindió el contrato después de lo que pasó?”.

Siguen prófugos

Pero sin dudas lo más preocupante es que a un mes y tres días del crimen las autoridades todavía no hayan podido dar con los supuestos autores. Tres caracterizados barrabravas del club Colón están siendo buscados desde ese mismo 13 de octubre fatídico, cuando al menos uno de ellos abrió fuego contra González Montaner, que se encontraba en el bar después de una jornada de trabajo en un pub de la zona.

A Walter lo mataron de un disparo a quemarropas, en medio de una pelea suscitada dentro del local céntrico, sobre el cual los vecinos ya habían anticipado que algo grave ocurriría si no se tomaban medidas urgentes. Además, un amigo de González Montaner debió ser hospitalizado con un disparo en el estómago, del que se recupera en medio de un total hermetismo, tal vez por temor a las amenazas.

Y no es para menos, puesto que quienes están siendo intensamente buscados son los hermanos Juan Abel “Quique” Leiva, Orlando Miguel “Nano” Leiva y Jorge Alberto “Caqui” Muñoz, tres caracterizados miembros de la barra brava sabalera que cuentan con frondosos antecedentes penales.

“No tenemos paciencia”

A propósito de la búsqueda, Raúl González Montaner reconoció que los investigadores “están trabajando perfectamente bien, con mucha paciencia, pero nosotros no tenemos paciencia”, dijo.

“Nos dan explicaciones, nos dejan conformes pero no tengo esa noticia de que los hermanos Leiva y Muñoz estén entre rejas. Yo no le deseo el mal a esta lacra asesina, porque en la Justicia ‘de arriba’ van a pagarla; les deseo que vivan 100 años, pero entre rejas. Son gente que ya no puede reinsertarse en la sociedad, son asesinos sin fronteras, no tienen discernimiento hacia ningún ser humano. Hasta las ratas inmundas son mejores que ellos”, se descargó.

Por último el hombre se mostró confiado en que “los van a agarrar, en cualquier momento vamos a tener una gran noticia, pero ya pasaron 30 días y me parece mucho”, sostuvo.