Si bien en marzo hubo una "desaceleración" respecto de febrero, en la cartera económica se admite que distintos factores siguen presionando los precios, como es el caso del incremento de las naftas, que registran una suba acumulada de 20% en lo que va del año. Asimismo hubo aumentos estacionales en distintos productos alimenticios. 

En este sentido, las subas que habrían sido autorizadas en la nueva lista de Precios Cuidados en promedio se ubican en torno al 5% y estos aumentos solo abarcarían a la mitad de los artículos, pero de una canasta que contendrá más de 184 productos.

El secretario de Comercio, Augusto Costa, anticipó días atrás que la inflación de marzo iba a caer porque las "conductas especulativas" que se dieron en los primeros meses del año "desaparecieron en la segunda quincena de febrero y la primera de marzo".

La expectativa de una desaceleración en el proceso inflacionario es identificada, asimismo, por cálculos privados. En tal sentido, la última medición de la Universidad Torcuato Di Tella muestra que la inflación esperada a nivel nacional por la gente se ubica en 30%, 5 puntos porcentuales por debajo del máximo histórico de 35% alcanzado en febrero.

Las mediciones de consultoras privadas, por su parte, tienden a situar entre 3% y 3,8% la inflación de marzo. Rubros como educación (subas en colegios privados), indumentaria y transporte (incrementos en taxis y subtes) son los que más inciden en el aumento del costo de vida del mes pasado.

Asimismo, señalan que existen factores que continuarán impulsando los precios en abril, como es el caso de la suba en los combustibles o el retiro de los subsidios a las tarifas de gas y agua. Paralelamente, sostienen que los precios mayoristas registraron en los primeros dos meses del año una suba cercana a 10% y que difícilmente las empresas no trasladen estos incrementos a los precios finales.

En lo inmediato, la cifra de inflación que dará a conocer el INDEC el martes 15 de abril se ubicaría nuevamente en las proximidades de las estimaciones de las consultoras privadas, en lo que se reconoce en estos medios como un intento de las autoridades por recuperar la credibilidad de las estadísticas oficiales.

Cabe recordar que el Gobierno informó que el crecimiento del 2013 fue 3%; muy lejos del 4,9% que reflejaba otro indicador oficial (EMAE) y en concordancia con el 2,9% promedio de aumento estimado por las consultoras privadas y que fuera difundido en el Congreso Nacional.

En medios privados se sostiene que las autoridades oficiales estarían haciendo un "sinceramiento" en los datos referidos al comercio exterior. Al respecto se comenta que existe una gran discrepancia entre las cifras de exportaciones correspondientes al año pasado informadas por el INDEC (u$s 83.000 millones) y las resultantes del balance cambiario del Banco Central (que rondaría los u$s 78.000 millones).

La reducción en los números de las exportaciones informados en enero y febrero no estaría reflejando - se sostiene - solamente una caída en las ventas externas de rubros como el trigo, sino también un mayor ajuste de los datos.