109 años de Colón: "Hoy más que nunca, prohibido olvidar"

 Hoy está cumpliendo años un pedazo grande de la historia de Santa Fe. Podría detenerme en cada uno de sus excelsos 109 años, y repasar sus grandes logros y sus destacados personajes que fueron elevando su imagen, para que los colores rojo y negro sigan flameando con orgullo, cobijando a la gran patria Sabalera. Esa que esta madrugada una vez más dijo presente frente a su casa, porque siempre el amor es más fuerte. Si Colón hoy está más vivo que nunca es porque sus hinchas jamás lo abandonaron e hicieron de la supervivencia toda una cultura nueva, se curtieron aún más en el sufrimiento.

Basta con ver lo ocurrido anoche en el advenimiento de un nuevo cumpleaños y luego de una temporada de mucho sufrimiento para entender que Colón no va a desaparecer nunca!!! Porque la identidad sentimental y social que envuelve a este club lo hace indestructible a cualquier tipo de calamidades, incluida la de los últimos personajes que atentaron contra la institución. Claro que tampoco conviene abusar de los anticuerpos naturales de los Sabaleros para resistir a ciertos desatinos, ni de la complacencia judicial y política, que muchas veces no quieren pagar el costo público que significaría hacer escarmentar a algún nefasto dirigente.

Y aprovecho el "convite" para volver a hablarle a Ud Señor. Sí, al de los “raros peinados nuevos” que dice surcar las calles de Santa Fe pero nadie lo ve, y eso que doy fe muchos quieren encontrarlo. Aprovecho este día de festejos por un nuevo aniversario de Colón para recordarle a Ud que esta celebridad debería tener hoy la alegría del objetivo cumplido: el equipo se queda en Primera. Pero no es así por Ud.
No es este el momento de caerle con rigurosidad ni a Landa, que hizo los deberes siempre con excelente caligrafía y el sábado se salió del renglón. Ni al indisciplinado Alcoba que dejó en el vestuario toda su caballerosidad y volvió hecho una furia al campo para vengar vaya a saber uno que cuenta pendiente con Desábato. Es que no quiero en lo más mínimo detenerme en la derrota de estos estoicos muchachos frente a Estudiantes. No es ese el motivo de mi arrebato, o de mi nueva ira. Es que el problema es Ud Señor, que se quedó con algo que no les pertenece y dejó al club de rodillas.

Sí, porque este Señor del que hablo se quedó con una categoría que no le pertenece, que no tenía antes y que ahora ostenta inescrupuloso. En el Barrio Centenario seis puntos al valor de lingotes de oro se esfumaron por su culpa y la impiadosa FIFA castigó con dureza a los menos responsables. Este estafador de ilusiones hizo que todo un pueblo continúe todavía en esta interminable procesión que tiene dos estaciones más por delante, y toda la crueldad de su fugaz contenido. A esta eterna, injusta agonía le quedan 180 minutos, porque Ud. con su habitual mesianismo no osó pagar lo que debía.

No ingresaré en el siempre escabroso terreno de las sospechas del dinero mal habido, de los rumores de pueblo. Esperemos que la justicia actúe y de su veredicto. Lo que hoy no se puede ocultar, no se puede esconder, ni camuflar con un discurso maquillado de preguntas pactadas, es que el “Señor de las influencias” y de los contactos importantes, es el auténtico responsable que Colón hoy NO ESTÉ SALVADO. No pagar en tiempo y forma, no solo motivó el descuento de puntos que ya había conseguido en la cancha, sino que además, provocó que el plantel no se presente a jugar un partido, que se dio por perdido sin el desarrollo del mismo ante Rafaela, justamente el rival con el que hoy compite y al que debería superar por siete unidades de no ser por Ud y su desidia.

Las victorias tuvieron siempre su paternidad, ahora no deje huérfana esta derrota. Más que nunca entonces, corresponde ser responsable. Por su absolutismo en las decisiones, su subestimación de la realidad y su beligerancia en las relaciones políticas del club. Contra esta verdad tangible, esta realidad palpable, Ud Señor solo debe asumir su culpabilidad y mostrar arrepentimiento, cosa que todavía no hizo.

Por eso, no siga echando mano a cualquier artilugio verbal para que aflore su repugnante soberbia, cada vez con menos adeptos; cosa que lamento profundamente porque daba gusto verlo o escucharlo coquetear con su séquito de alcahuetes a quienes no les importaba inmolarse por Ud Señor. Hasta que lo dejaron solo. Porque ellos, los que lamieron sus botas y recogieron sus migajas, seguramente deberían sentirse hoy al menos un poco culpables por tergiversar tanto la realidad como Ud. Pero sabe una cosa, aprendieron de Ud., se eyectaron a tiempo, se hicieron y se hacen los distraídos mientras “todo pasa”, como dice el jefe, su exjefe. Es más, algunos ya están en el bando de enfrente marcando sus errores como grandes inquisidores.

Sabe una cosa Señor, no me quiero despedir sin antes comentarle una noticia que puede importarle. Permítame el atrevimiento de hacerlo desde estas humildes líneas, si es que alguno de “sus muchachos” no lo hizo ya, cosa que no creo porque el artículo que adjunto lo puede afectar y ellos supieron cuidar siempre de su seguro bienestar, como por ejemplo en el tema de la Virgen. La noticia expresa lo siguiente: “Después de ser procesado en 2011 por administración fraudulenta cuando fue uno de los que estuvo a cargo del gerenciamiento de Blanquiceleste SA, Fernando De Tomaso fue sentenciado por la justicia a tener que pagarle un millón de dólares a Racing por los daños que le hizo a la institución. Además el gerenciador tendrá que llevar adelante tareas comunitarias para limpiar su pena judicial”.

Esta noticia nos deja un poco más tranquilos a los que bregamos por un fútbol honesto, aunque no nos conforma. Lo mejor sería ver algún dirigente preso, con los dedos pintados y el traje a rayas puesto.¡Ojo que no lo digo por Ud., faltaba más!… sino por tanto malandra que incrementó su patrimonio a costa de vaciar el club hasta no dejar nada. Se debe condenar a alguien para que sirva de ejemplo para la sociedad. Hay que demostrar también que la Justicia actúa sin ningún tipo de reparos para que dejen de robar, de saquear... Pero sabe qué, los seis puntos y un partido menos en el calendario, eso sí es su responsabilidad, y hoy 5 de mayo, está prohibido olvidar!

Algo más, permítame que lo moleste, aunque sé que a Ud le sobra tiempo porque ya dijo que su socio se encarga de la oficina. Esto lo dijo Ud. hace algún tiempo con su habitual indiscreta jactancia a un medio nacional. Le decía, Ud no sabe cómo está Don Carlos… lo recuerda ?!!! Espero que sí aunque su talla y su garbo no le permitieron ver a “los Don Carlos”. Será porque Don Carlos labura de sol a sol, o porque no vive en un country ni pasea en Puerto Madero. Le cuento que el “viejo” sigue enojadísimo con Ud! Lo quiere ir a buscar a su casa, porque dice que Ud fue toda la vida del mismo barrio, aunque confiesa que desde hace unos años no lo vio nunca más. El médico le prohibió ir a la cancha. Hasta le sugirió que los dos partidos que faltan no lo escuche por la radio ni los vea por la tele. Sabe lo que pasa Señor, para Don Carlos la camiseta roja y negra, la “sangre y luto” que Ud manchó, es mucho más que el equipo de fútbol. Colón es la infancia, el barrio, los amigos, la familia, y ahora también el nieto Francisco… Colón es la vida misma Señor, su riqueza: SU HERENCIA!!! La de Don Carlos!!!... Y creo que la suya, lamentablemente también, Señor! Hoy más que nunca, definitivamente, PROHIBIDO OLVIDAR!