El dólar oficial cerró la rueda de ayer con un alza de un centavo a $ 8,12 en una jornada en la que la volatilidad de la divisa fue lo que se destacó. El billete comenzó en las primeras horas con una subas sostenida debido a la fuerte demanda en el mercado mayorista. Ya sobre el mediodía algunos bancos frenaron la escalada con algunos pases. A partir de allí el alza se moderó y sobre el final de la rueda aparecieron los exportadores con sus liquidaciones diarias.

Las ventas de los cerealeros agregaron presión bajista al dólar por lo que el Central salió en los últimos minutos de la rueda a comprar para sostener el precio. La autoridad monetaria finalizó con un saldo neto comprador por u$s 50 millones.

Los analistas consultados coinciden en que en el mercado se acentúa la tendencia de las minidevaluaciones diarias que en promedio son de un centavo. "Por ahora se sigue con el ritmo de subas pequeñas pero continúas y se posterga la idea de una devaluación como la ocurrida en enero", comentó un cambista en diálogo con Ámbito Financiero. De todos modos en las mesas de cambio no se arriesgan en afirmar en que esta será una postura inflexible en lo que resta del año.

En el segmento de futuros, entre bancos se operaron u$s 90 millones en una rueda en la que estuvo presente el BCRA con ventas en distintos plazos ante un aumento en los valores, arrastrados por la suba del contado.

Por su parte, en el ROFEX se pactaron u$s 300 millones también con la venta de partidas por parte del ente regulador, cuando se había visto una suba temprana de hasta 5 centavos en diciembre. Finalmente lograron bajarlo a $ 9,490 para ese plazo.

Al contrario de lo ocurrido en el mercado oficial, el blue finalizó con una leve suba de cinco centavos a $ 11,55 para la venta en un mercado planchado y en donde la demanda sigue siendo acotada. Respecto al tipo de cambio implícito, el contado con liquidación descendió a $ 10,57 y el dólar bolsa avanzó a $ 11.