Quinto día de paro de subte en sede inaugural de Brasil

La gigantesca Sao Paulo se apresta para una nueva jornada caótica este lunes, a tres días del inicio del Mundial, luego que trabajadores del metro resolvieron mantener una huelga que la justicia declaró ilegal pese a amenazas de despido y multas.

En su quinto día de huelga, los trabajadores han convocado a protestas a las 7 en la estación Ana Rosa, en el centro de esta ciudad donde se inaugurará la Copa del Mundo, y amenazan con enviar piquetes que impidan el funcionamiento de los trenes.

En esta misma estación, varios huelguistas se enfrentaron el viernes pasado con pasajeros que querían entrar al metro y la policía dispersó a los trabajadores a palazos y con gases lacrimógenos.

El metro de Sao Paulo transporta cada día a 4,5 millones de personas y es fundamental para llegar al estadio Arena Corinthians, donde este jueves tendrá lugar la ceremonia de apertura del Mundial y Brasil y Croacia disputarán el primer partido.

"Hay una Copa del Mundo, el mayor evento deportivo mundial. El gobierno del estado (de Sao Paulo) tiene elecciones a fin de año, tiene que negociar", señaló el presidente del sindicato de los empleados del metro, Altino Melo dos Prazeres, en la asamblea celebrada el domingo.

Según los propios operarios, a su protesta matinal en la estación de metro se sumarán miembros del Movimiento de Trabajadores Sin Techo (MTST) y varias otras organizaciones sociales.