Guillermo Nielsen:"Se están creando holdouts de segunda generación"
El ex secretario de Finanzas y mentor del canje aseguró que la mayoría de los acreedores reestructurados no va aceptar el cambio de jurisdicción que plantea la Argentina. Dijo que el proyecto tiene una técnica legislativa "muy pobre" y planteó que el
"En definitiva lo que se está haciendo es crear holdouts de segunda generación, de u$s11 mil millones, que es lo que está emitido bajo legislación de Nueva York. Y la mayoría de estas entidades no va aceptar el pago y mucho menos el canje por bonos argentinos", pronosticó Guillermo Nielsen en diálogo con el periodista Paulino Rodrígues en los estudios de InfobaeTV.
De ese modo el ex secretario de Finanzas del gobierno de Néstor Kirchner se refirió al proyecto que giró la Presidente al Congreso para cambiar la jurisdicción de pago de los tenedores de bonos reestructurados y abrir el canje para que ingresen quienes aún conservan los títulos que cayeron en default en 2001.
El texto del proyecto oficial ingresó este miércoles por el Senado de la Nación y cosechó fuertes críticas de los economistas. Los partidos opositores son más cautos y convocaron a reuniones internas para analizar qué postura llevarán al Congreso.
Nielsen aseguró que la iniciativa del Gobierno demuestra que en realizar no hay una intención de evitar los efectos de la cláusula RUFO sino todo lo contrario: "La Argentina no quiere pagar lo determinado por el juez (Thomas) Griesa y por toda la justicia norteamericana, porque este caso pasó por la Cámara y por la Corte".
La cláusula RUFO, que vence el 31 de diciembre de 2014, obliga a la Argentina a igualar a los tenedores de bonos reestructurados cualquier oferta en mejores condiciones que le realice a los denominados holdouts, es decir, los fondos de inversión que no aceptaron la quita ofrecidas en los canjes de 2005 y 2010. Hasta hoy se creía que la estrategia del Gobierno era dilatar la negociación con estos grupos a la espera de que venza la vigencia de la RUFO. Sin embargo, la estrategia adoptada por la Presidente demuestra otra cosa, intuye el especialista en deuda.
Nielsen explicó, además, que la nueva ley enviada al Congreso tiene puntos de conflictos con otras normas vigentes que prescribían que los cambios significativos en la reestructuración de la deuda deben ser aprobados por mayoría absoluta de tenedores. En este caso, la Argentina estaría incluyendo una modificación significativa de las condiciones de pago sin consultar los tenedores de los bonos del canje. Se considera una mayoría absoluta cuando el 85% de los tenedores de bonos votan en el mismo sentido.
También cuestionó la redacción de la norma - es bastante pobre, dijo- y pidió que el Congreso se esmere para tener un borrador acorde a los elementos regulatorios que tienen gran importancia para la vida institucional del país.
El ex funcionario intuye que si se aprueba el proyecto girado al Congreso habrá una catarata de juicios contra el Estado Argentina que probablemente volverá a perder y eso genera más incertidumbre en un panorama económico complicado. A la par plantea dudas en el intermediario elegido por el Gobierno -Nación fideicomisos- porque "no tiene la menor idea" de cómo actuar en este tipo de casos.
Una vez más Nielsen cuestionó la ausencia de diplomacia financiera para encarar la controversia de la deuda ya que la Argentina tuvo mútliples oportunidades de plantear el conflicto en sedes internacionales antes de que la Corte desechara tomar el caso y se desencadenaran las últimas decisiones de Griesa.
"La Argentina está incomunicada con el mercado financiero. Y lo que se comunica, se comunca mal. Y esto nos aleja de la normalización financiera, que es algo fundamental para retomar el sendero de las inversiones y el crecimiento", sentenció.
Y completó: "El Gobierno muestra que no tiene vocación de resolver esto y lo deja para el gobierno entrante".
Nueve meses de Kicillof
Nielsen analizó la conducción económica del país. Aseguró que los integrantes del equipo económico tienen experiencia y capacidad pero no particularmente en los temas de deuda. A modo de ejemplo, dijo que la economía es como la medicina: una disciplina que necesita especialistas.
"En la medicina tenés el cirujano y el especialita en hígados. Acá en economía es lo mismo, pero quizás se hace menos transparente. La gente piensa que los economistas son un bloque único pero no hay nada en la experiencia de (Axel) Kicillof que indique que tiene experiencia en los temas que la Argentina debe resolver", completó.