Tres compositores de la región ofrecen una propuesta en torno a fórmulas instrumentales diferentes cada vez. Reivindican una música de cámara de horizontes abiertos, entendiéndola como acústica, intimista, cuidada en la escritura, como siempre lo fue. Barbiero, de Pedro y Marcipar comparten el hecho ser instrumentistas activos en música popular pero habiendo hecho escala en la formación académica, y el hecho de ser cultores de la música popular argentina sin descuidar el interés por las búsquedas contemporáneas así como las diferentes prácticas en torno a la improvisación. Con estos elementos en común, a los que se suman las riquezas de sus recorridos individuales en diferentes géneros, estos tres destacados compositores proponen desde la escritura musical este concierto de música de cámara.

En el encuentro artístico no sólo se prevé la interpretación de las obras musicales sino que además se plantea una instancia de diálogo entre compositores y público, en donde se expondrán sus fuentes de inspiración y búsquedas que los motivan. Esta instancia sustentará momentos de divulgación y será enriquecedora para la formación de público, en la transmisión de elementos de apreciación musical.

Exploración musical

Según explican desde Aguantinta Leguanata, se “trabaja en base a la exploración de un terreno poco desarrollado: la plasmación de ritmos propios de nuestra música popular, con sus giros estilísticos, acentos y otras tantas características. Todo esto se traduce a los códigos que habitualmente se usan en la música clásica”. Por otro lado, continúan, “amén de tomar como soporte estas rítmicas populares, el tratamiento en cuanto al desarrollo formal, las texturas, los recursos instrumentales, son abordados desde la investigación y el estudio propio del género clásico”. Todo esto supone el “desafío de una integración de las dos tradiciones que habitualmente corren por carriles separados. Esta exploración ha sido quizás más habitual dentro de la música ciudadana, pero existen pocos referentes de esta búsqueda en los ritmos folclóricos. Podemos mencionar como ejemplo la valiosa obra de Carlos Guastavino, Waldo de los Ríos, Oscar Cardozo Ocampo o José Luis Castiñeira de Dios; y, más contemporáneos, a ‘Polo’ Martí, Juan Quintero, Fernando Tarrés, pero no son muchos más los nombres que se pueden citar. Salvando las distancias, este es un trabajo que apunta en ese sentido”.

Finalmente, indicaron que “las piezas están encuadradas en una estética anclada en ritmos populares de nuestra región, con un tratamiento y formato para ser interpretados por instrumentos de la tradición de la música clásica. Con la conciencia de que en la partitura no se puede reflejar todo (es el mapa, no el terreno), se pretende en estas producciones una aproximación lo más fiel posible a las rítmicas populares inspiradoras del material con la idea de que pudieran ser interpretadas incluso por músicos que no conozcan estas fuentes”.

En esta oportunidad, la música creada por los compositores será interpretada por un quinteto de vientos integrado por Luis Barbiero, en flauta y pícolo, Pablo Fernández Brollo, en fagot, Anabel Contigiani, en oboe, Julián Marcipar y Matías Marcipar, en clarinete.