Boca tenía el triunfo en Arroyito, pero Rosario Central se lo sacó en la última jugada, con un 1 a 1 que dejó la llave abierta en la Copa Sudamericana. No obstante, el conjunto de Rodolfo Arruabarrena sabe que ha quedado bien parado para el partido de vuelta del 17 en la \\'Bombonera\\', donde el 0 a 0 le permitirá avanzar de fase. En tanto, los de Miguel Ángel Russo -más allá de que rescataron la igualdad sobre la hora- tendran que ir a anotar en la revancha para clasificarse. Pero cabe destacar que sobre el cierre le expulsaron a Alejandro Donatti por una doble amonestación y no estará en el segundo partido.

El primer tiempo fue perfecto lo realizado por Boca, que atacó a su rival, anotó y encima no pasó apuros en un partido que comenzó con incidentes porque a Agustín Orion le arrojaron un proyectil que le produjo un corte. Además, Mauro Vigliano permitió en exceso la pierna fuerte del "Canalla", que jugó al límite cada una de las pelotas al inicio. No obstante, al conjunto local no le cayeron ideas para esquivar o romper con la presión del visitante, que lo perdió con Andrés Chávez, quien le dio con zurda desviado de entrada.

Sin embargo, los de La Ribera abrieron el mismo por intermedio de Leandro Marín, luego de un subida del defensor por la derecha, un posterior enganche y después un zurdazo que parecía fácil pero que engañó a Mauricio Caranta porque Chávez buscó cabecear, le erró al frentazo y descolocó al \\'1\\' del conjunto de Arroyito, quien no pudo hacer nada para evitar el 0-1. Con este resultado, el equipo local tenía un resultado adverso en el entretiempo y encima ante un rival que poco se parece (o nada) al que hace poco más de una semana perdía todos los partidos con Carlos Bianchi.

Fue pobre la imagen dejada en la primera parte por Central, que salió en el complemento a intentar cambiar la historia. Y así, con el paso de los minutos, mereció el empate frente a un Boca que se fue metiendo en su área y no la pasó bien, pero que supo aguantar el partido durante gran parte del complemento. Orion se lo tapó a Walter Acuña, quien le dio débil, y también un tiro libre a Rafael Delgado, en el que hubo una mano muy protestada por todo el "Canalla", tras el rebote del arquero.

A esto hay que agregarle varios remates desviados y un zapatazo de Delgado que sacudió el travesaño del "Xeneize". Por este motivo, más allá de alguna que otra contra que frenó Caranta, lo cierto es que el local manejó la segunda etapa, donde además Vigliano no cobró una falta en la línea del área a Paulo Ferrari, a quien lo derribaron cuando iba a pegarle al balón.

De esta manera, la historia parecía que se iba con la victoria de Boca en medio de un arbitraje cuestionado por el local. Sin embargo, como se lanzaron proyectiles (en el comienzo del partido a Orion y en el segundo tiempo se arrojó un encendedor desde las tribunas) el tiempo de adición fue de seis minutos. Y en esos segundos de prórroga, Central se encontró con un tiro libre en el instante final y Pablo Becker, tras un desvío en el camino, estableció el empate a los 51 minutos, lo que desató el festejo del público "Canalla" y el enojo de todos los jugadores del conjunto de La Ribera, quienes lo fueron a buscar a Vigliano por la infracción cobrada. Más allá de las protestas, lo cierto es que la falta estuvo bien sancionada y el 1 a 1 dejó todo abierto para la revancha.