Una banda que comercializaba drogas en una parrilla de la vecina ciudad de San Lorenzo fue desbaratada en un procedimiento llevado a cabo por efectivos de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones, ex Drogas Peligrosas con el apoyo de la Tropa de Operaciones Especiales. Como resultado de ese trabajo conjunto, tres personas fueron detenidas y se logró secuestrar varias armas y drogas.

Los procedimientos se llevaron a cabo en la vivienda de Santiago del Estero al 500, propiedad del principal investigado, Julio C., de 60 años quien fue apuntado como proveedor y que estaba acompañado por una mujer de 31 años, Vanina M., y por un hombre de 35, Mauro P., que vendía con la modalidad de delivery.

En el lugar también se secuestró una pistola calibre 9mm marca Bersa y un revólver calibre 22 de la misma marca, con la carga completa y listos para usar.

En esa vivienda se encontraron 231 gramos de clorhidrato de cocaína, lista para ser fraccionada en bochitas. Y en un auto Ford Falcon estacionado en la puerta se escondían otros 65 gramos de cocaína.

Otros allanamientos se registraron en la vivienda del delivery, en Dorrego al 2800, donde se secuestraron más de 2,4 kilos de marihuana, distribuido en cuatro panes irregulares; unos 185 gramos de clorhidrato de cocaína, distribuido en bochitas lista para su comercialización; y dos revólveres calibre 22.

El tercero fue en un local ubicado en bulevar Mitre y San Martín en el que funcionaba la parrilla El Paso. El negocio había sido adquirido por los integrantes de la banda y en la actualidad funcionaba como pantalla, de acuerdo a lo informado por fuentes policiales. En el lugar se secuestró una escopeta calibre 28 y 25 cartuchos, tres de ellos percutados y documentación de relevancia para la causa..

El inicio de la causa radicó en varias denuncias recibidas al sistema de emergencias 911, reclamos de vecinos a través del Municipio y denuncias a través de testigos con identidad reservada.