Cangas eligió la víspera del cumpleaños 78 del pontífice argentino, para la presentación de su libro De Padre Jorge a Papa Francisco. El camino de un pastor con olor a oveja (Gram Editora), una selección de algunas de las mejores fotos que tomó a lo largo de una década en la cual siguió y retrató al cardenal Bergoglio en su tarea pastoral.

El libro fue presentado anoche en el monasterio Santa Catalina, en el centro porteño.

"Mi objetivo es mostrar que las actitudes y gestos del papa Francisco que hoy asombran al mundo, son una continuación de lo que demostró en Buenos Aires durante su ministerio pastoral como arzobispo de la Ciudad", dijo Cangas.

"Este libro representa el signo de apertura que está viviendo la Iglesia en estos momentos, de la mano del papa Francisco. Es como un álbum de fotos familiares, que nos invita no a pasarlas rápido sino a contemplar ese estilo de vida que Jorge Bergoglio ya llevaba entre nosotros", dijo el hermano Agustín Martínez, quien habló en representación de Gram Editora, una editorial católica fundada por los Hermanos Maristas en la Argentina en 1921.

Por su parte, el padre Gustavo Antico, rector de Santa Catalina, resaltó el "ojo del fotógrafo", cuyo "corazón vibró al captar las imágenes" y que busca "transmitir un mensaje a través de las fotografías, de manera cercana y sencilla, al modo de Francisco". También dijo que el principal objeto de la publicación es "misionar y mantener encendida la vida de fe en la Iglesia".

Como bien señala monseñor Jorge Lozano, Obispo de Gualeguaychú y presidente de la Comisión de Pastoral Social del Episcopado Argentino, en el prólogo del libro, "la enseñanza de Francisco no es sólo verbal".

"Sus gestos y actitudes son también parte de su doctrina", escribe Lozano. Y eso es precisamente lo que acerca este libro: Cangas nos muestra a Jorge Bergoglio en todas las facetas de su tarea pastoral, con la gente, rezando, predicando, escuchando a otros, compartiendo liturgias, explicando y, como lo atestigua el propio fotógrafo -en alusión a los comentarios sobre el gesto adusto del Cardenal en contraste con el del Papa- también sonriendo.


"Muchos periodistas de mi país y del mundo -escribe Enrique Cangas en su libro- vinieron a consultarme sobre este fenómeno tan cautivante de la sonrisa de Francisco. La verdad es que el cardenal Bergoglio sonreía en Buenos Aires. ¡Claro que sí! Pero no de la manera que hoy lo hace... Sonreía sobre todo en los momentos de contacto directo con el pueblo, allí donde no estaban las cámaras de televisión ni los fotógrafos de los grandes medios".


Pero eso que no captaron los "grandes medios" quedó registrado en la cámara de Cangas, fotógrafo y hombre de fe, que por diez años trabajó en una radio del Arzobispado pero también en forma independiente para otros medios católicos.

Cuando Bergoglio fue elegido Papa, Cangas montó una muestra fotográfica que ya ha recorrido buena parte de la Argentina: Francisco: servidor en Buenos Aires, servidor para el mundo. Justamente, el fotógrafo dijo que la idea del libo surgió del pedido de la gente que vio la exposición, que así podrá tener las fotos consigo. "El objetivo es evangelizar a través de las imágenes y que motive en los lectores los mismos gestos del papa Francisco: coherencia, sencillez, humildad. Y que también los impulse a rezar por él, como siempre pide", dijo Cangas.


El interés por la vida de Jorge Bergoglio en Argentina tras su elección como Papa creció de modo exponencial. Y en consecuencia también por testimonios sobre esa etapa de su apostolado como estas fotografías tomadas por Enrique Cangas a lo largo de 10 años.