Camión narco del Leyes: toda la cúpula policial de la UR I comprometida
Tres policías fueron indagados y están detenidos, uno de ellos tenía dominio sobre la droga. El Fiscal pidió la indagatoria también de los jefes de la regional. El rol de “Aguja” Agüero y las maniobras de apriete para que no se conozca la verdad. Las grabaciones del 911 fueron claves.
Once efectivos policiales, la mitad de ellos con responsabilidades jerárquicas en la fuerza, fueron imputados por el Fiscal Federal santafesino Walter Rodríguez, que le pidió al juez federal Reinaldo Rodriguez que los llame a declaración indagatoria. Hasta este viernes, tres de ellos se habían presentado frente al magistrado a dar explicaciones.
Los policías están acusados de falsear el acta de procedimiento de un operativo realizado el 2 de noviembre de este año en la zona de Arroyo Leyes, donde acudieron por el llamado de vecinos que informaban que a la vera de la ruta provincial 1 había un camión con un conteiner que era sospechoso. La nave de gran porte tenía en su interior poco más de 1.600 kilos de marihuana. La versión oficial de los primeros momentos resaltaba el secuestro y anunciaba que no se pudo detener a nadie. Sin embargo, el fiscal pudo probar que dos personas fueron detenidas por personal policial que arribó al lugar y luego de forma exprés e ilegal fueron liberados.
Walter Rodríguez pidió el pasado 12 de noviembre la indagatoria de los agentes Alejandro Daniel Alberto Agüero (que aparece en la foto), Martín Díaz (Jefe de Zona de Inspección), Cristian Fabio Hang (Jefe de Orden Público) Iván Duilio Papini, Matías Ezequiel Zoratti, Claudia Rosana Moreira, Mauro Dionisio Ruoppulo, Fabián Manjka, Luciano Astrain, José Murgia, Sergio Vergara (jefe de la Unidad Regional 1) y Sergio Fernández (subjefe de la Regional 1)
Díaz, Hang y Agüero fueron indagados en las últimas horas y quedaron detenidos. Agüero por ser considerado parte de la banda narco que trasladaba y bajaba la droga en la costa y los otros dos por haberle facilitado la libertad y permitido que se retire droga del camión.
Agüero y Díaz ya había sido pasados a disponibilidad hace casi dos meses, sospechados de su participación en el hecho. El representante del Ministerio Público escribió en su pedido de indagatoria que: “existe un estado de sospecha suficiente relativo a que Martín Díaz y Cristian Fabio Hang favorecieron la evasión de Alejandro Daniel Alberto Agüero […], incumpliendo sus deberes de funcionarios públicos y encubriéndolo del accionar de la justicia dado el rol que cada uno de ellos posee como funcionarios policiales, permitiendo además la sustracción de parte del cargamento de marihuana inicialmente detectado e insertando datos en el acta de procedimiento ideológicamente falsa en cuanto al pesaje y especie de la droga y en lo relativo a la no inclusión de la presencia en el lugar del presunto responsable del suceso -y otros sujetos que lo acompañaban-, además de omitir toda diligencia respecto de vehículos afectados a la maniobra delictiva”.
En otro plano de responsabilidades el fiscal imputó por falsedad ideológica de documento público a los oficiales Papini, Zoratti, Moreira, Ruoppulo, Manjka, Astrain y Murgia. También alcanza el pedido de indagatoria a los responsables máximos de la URI Sergio Vergara y Sergio Fernández, quienes difundieron el procedimiento y lo calificaron de exitoso y se encargaron de hacerlo público en las páginas del diario El Litoral, según estableció el fiscal en la investigación.
Una trama de poli narcos
Alejandro Agüero, alias “Aguja” es un sargento que se desempeñaba como numerario de la Zoana de Inspección de la costa. Sin funciones especificas, era una suerte de “comodin” en la estructura de la fuerza. Estaba siendo investigado por la Secretaria de Delitos Complejos por su relación con la venta de drogas en la costa santafesina. “Aguja” era uno de los responsables de la droga secuestrada el 2 de noviembre pasado. Usaba una decena de teléfonos que luego descartaba y así se puede apreciar en otras causas, donde personas enjuiciadas por venta de drogas tenían un trato frecuente con el sargento a través de mensajes de texto.
“Aguja” esperaba al camión con la droga esa noche de lluvia. El vehículo vino de Paraná, cruzó el túnel subfluvial a las 23.46 hs y luego quedó con balizas parado en un costado de la ruta nacional 168. Una camioneta blanca lo fue a buscar y lo guió hasta el rulo distribuidor a la altura de barrio El Pozo para luego dirigirse al kilómetro 14 de la ruta provincial 1. Una vez en el lugar, arribaron una camioneta Amarok color blanca y un utilitario Peugeot Partner que se dispusieron a bajar la droga del camión para su posterior traslado. Eso quedó plasmado en las declaraciones de los vecinos del lugar. Los vecinos observaron los movimientos y denunciaron al 911 la maniobra, Antes que los efectivos llegaran al lugar las camionetas se fueron en dirección a la ruta, sentido sur. Los efectivos llegaron a diez minutos antes de la 1 de la mañana del 2 de noviembre. En esos diez minutos que faltaban para llegar a la 1, llegaron móviles y agentes del Comando Radioeléctrico, de la comisaría de Rincón y de la Octava Zona de Inspección, en el cual iba su jefe, el comisario Martín Díaz, el de mayor jerarquía en ese momento.
Díaz informó entonces el hallazgo del camión y la detención de una persona que era persnal policial. En el audio del 911 grabado y aportado a la causa se escucha clarito cómo se informa desde el lugar de los hechos que había “un camión con precursores y un personal policial detenido”. Cuando el Jefe de Orden Público, comisario Cristian Hang escuchó la frecuencia del 911 se comunicó con la base y pidió que le den la dirección exacta para constituirse. Mientras tanto, el operador del 911 logra comunicarse con la radio del móvil que llegó al lugar en los primeros momentos y de la comunicación surge que, quien estaba en Arroyo Leyes le informa que “hay un personal policial detenido y que le camión tenía marihuana, cocaína y precursores para estirar”.
A las 2.11 de la mañana del 2 de noviembre, una funcionaria se comunica con el operador del 911. En la comunicación de escucha: “Che,, viste que es un personal policial el detenido”, – Sí, el aguja Agüero, mueve toda la merca en la zona, pero es consensuado”. En otro tramo de las grabaciones del 911 se advierten diálogos en los que interlocutores hablan con naturalidad del “Aguja” Agüero como el que fue detenido y se soprenden que no haya quedado detenido cuando en principio se habían dicho que sí. “Fue un arreglo bajo cuerdas”, dice uno.
Un testigo que declara bajo la protección de identidad señaló que cuando llegó al lugar, el comisario Díaz estaba hablando con Agüero, quien le dijo que “libere al del camión que no tiene nada que ver”. El testigo, que es una persona que se desempeña dentro de la fuerza dijo que Díaz le pidió que busque a testigos y que cuando regresó ya no estaban no estaban ni Agüero, ni el camionero ni los vehículos. “Le pregunté por qué los había liberado y no me contestó nada”.
El personal policial llegó primero que Díaz al lugar y al verlo a Agüero éste se e acercó y le dijo “eh, amiga” y yo le dije “no me llames así”. Me dijo que estaba consensuado todo y que a mí me servía con el secuestro de lo que quedaba en el camión. “Yo sabía que este personal estaba vinculado a la venta de drogas. Yo envié dos notas a la Secretaria de Delitos Complejos contado esta situación, lo que generó que (el jefe de Inteligencia del Centro, Claudio) Prietto venga a entrevistarme”.
Por cierto, la ex Dirección de Drogas Peligrosas ya venía siguiendo los pasos de Agüero, a quien sindicaban de proveedor de drogas en la costa santafesina y que para ello se trasladaba en el utilitario Peugeot Partner color gris y con vidrios polarizados, la misma que participó del hecho en Arroyo Leyes. En la causa declara el Jefe de la Brigada Operativa Departamental antidrogas y dice “que Agüero trabajo en Inteligencia de drogas y ahora está en la Octava Zona de Inspección, está siendo investigado como uno de ls proveedores en la zona de la costa y aparece vinculado a otros infractores”.
Concretamente por el hecho de Rincón, el juez Reinadlo Rodríguez le tomó declaración indagatoria a Agüero, Díaz y Hang y todos ellos quedaron detenidos. Y los motivos ya fueron explicados: Díaz y Hang estuvieron en el lugar casi en todo momento, hablaron con Agüero, quien estuvo detenido unos minutos (remitirse sino a las grabaciones del 911) y luego lo liberaron. Eso se desprende también del personal policial que declara en calidad de testigo reservado que observó toda la situación con indignación, al punto que Agüero en un momento le dijo : “no pasa nada amiga”. Yo le dije que era responsable de envenenar a os chicos para que cometan delitos. Me contestó: “Y, son negocios amiga”.
La funcionaria fue citada al día siguiente del hecho en la costa a la jefatura de Policía y fue recibida por el jefe de Orden Público Cristian Hang, que le pidió que le cuente todo lo que había pasado y le respondió; ” lo que saben todos”. Luego la llevó hasta el despacho del Jefe de la Unidad , Sergio Vergara, donde también estaba el comisario Sergio Fernández.
Allí otra vez le pidieron que explique lo que había pasado. Fernández me dijo por qué no le había dicho en el lugar lo que ocurrió realmente a lo que le dijo “¿me estás tomando el pelo? (…) qué es lo que le molesta, que le cagamos un negocio?”. Fernández se hizo el ofendido y le dijo que no quería quedar como un estúpido o un “pajero”. Y la mujer le dijo que a Vergara y a Hang no los conocía tanto, pero que “en tantos años de carrera se que existen negocios en la policía, que yo no participe de ellos no significa que no los haya”. Vergara saltó del asiento y dijo: “acáhay cosas consensuadas que se hacen desde hace años, que son las putas y la quiniela clandestina, pero lo otro no”, refiriéndose a la droga.SE fue de ahí sin recibir ninguna indicación pero en sede judicial dijo que “me sorprendió que no hayan sabido nada, dado que Agüero es un policía que está en el negocio de la droga y todos los saben y además también me pareció curioso que nadie haya tomando en cuenta lo que dijo el chofer de Díaz en el 911 que la droga “pertenecía al Jefe de la Policía de la Provincia”.