Bernardo Kliksberg estuvo en Rosario invitado por el Foro de intendentes, presidentes de comuna y legisladores justicialistas, ciudad en la que disertó sobre “Cómo impulsar las alianzas estratégicas de políticas públicas, empresas, organizaciones de la sociedad civil y universidades por un desarrollo equitativo e inclusivo”.

Kliksberg es reconocido mundialmente como fundador de una nueva disciplina, la gerencia social y es pionero de la denominada “ética para el desarrollo”, el capital social y la responsabilidad social empresarial.

Era uno de los intelectuales preferidos de Hermes Binner, quien promovió en varias oportunidades sus visitas a la provincia de Santa Fe y también sus disertaciones magistrales. Pero en la conferencia que dio en Rosario no estuvo el mandatario. Kliksberg fue invitado esta vez del Foro de intendentes peronistas, que encabezan Alejandro Ramos, de Granadero Baigorria y José Freyre, de Venado Tuerto.

El economista también dio una charla sobre “la crisis mundial, sus impactos en América Latina y la responsabilidad social”, en la sede de la Asociación Empresaria de Rosario. En esta ocasión sostuvo que “la Argentina ha quedado, por un lado al margen del mercado financiero salvaje porque dejaron de prestarle. Resultó muy positivo quedar fuera de esos encadenamientos financieros”.

“El apoyo de la ciudadanía a este modelo es un gran protector frente a la crisis. El proceso de integración regional ayuda muchísimo. Argentina, Brasil y Uruguay son las tres economías que están creciendo muy bien bajo un mismo modelo básico y ese espacio se está ampliando a la Unasur. México, por ejemplo, tiene graves problemas y sigue bajo un modelo neoliberal atrasado. En definitiva, consecuencias de la crisis vamos a tener, pero la capacidad de reaccionar frente a ella es infinitamente mayor.

“Nuestro país ya pasó por lo mismo que está pasando en Wall Street, donde los jóvenes agitan el lema ‘somos el 99 por ciento’, en referencia a que hay un uno por ciento que se enriqueció con la especulación salvaje.

“El pueblo argentino hoy demuestra que no quiere saber más nada de eso, tiene en claro que necesita un proyecto de economía con rostro humano, a favor de la pequeña y mediana empresa, de la industrialización y de la inclusión de los jóvenes. Estamos avanzando en esa dirección con resultados muy concretos”, sostuvo el economista.

—¿Sigue habiendo un reclamo ético de la sociedad a la clase dirigente?

—Sí, la gente le pide ética a los empresarios. Es necesario transmitir que a un empresario con ética le va mucho mejor en lo empresarial y en lo personal. Necesitamos empresarios con alta responsabilidad social. Y por el lado de los intendentes es bueno conversar sobre cómo lo local, lo municipal, tiene un rol decisivo en el rumbo del país porque allí es donde bajan finalmente las políticas públicas.

Además de buen político, el intendente debe ser un buen gerente. Eso es fundamental porque el mercado se rige por maximizar todo en el menor tiempo posible. Y sin regulación, sin límites, el mercado genera inequidad y pobreza.

—¿Cuál cree que es, en lo que va del siglo XXI, el signo distintivo desde el punto de vista económico?

—Este siglo aparece como el de una gran lucha histórica entre el neoliberalismo, que se niega a desaparecer del escenario. Pero el neoliberalismo ha perdido la pelea intelectual y demostró que es un sistema inepto para manejar la economía. Ha destrozado a los Estados Unidos y a Europa. Asoma, por el contrario, una economía con rostro humano y esto está floreciendo con mucha fuerza en América Latina.