Flojo estreno de Colón en su vuelta a Primera División
El equipo de "Mostaza" Merlo cayó de visitante frente al Ciclón por 2 a 0. Mauro Matos, a los 33 minutos de la etapa inicial y Villalba a los 24 del complemento, marcaron para el local. Opaco desempeño de los santafesinos en su vuelta a la "A"
Fue un retorno a primera nublado, pálido; que no se ajustó al reluciente y brilloso día en Capital Federal en pleno febrero. Fue un día en que las expectativas quedaron enterradas bajo la sombra de tres postes blancos y una línea de cal pintada con desgano. La vuelta fue bajo un gran manto de dudas y muy pocas certezas, más allá del resultado final, 2 a 0 a favor de los de Bauza, por los goles de Matos y Villalba.
“Hay un sistema táctico muy defensivo que huele a rancio. Ojalá se trate de una mala impresión de quien suscribe”, dijimos en la previa del partido ante San Lorenzo, al tiempo que recalcamos que “el manual de los recaudos está a la palestra si se trata de un Reinaldo Merlo que no suele derrochar riesgos. (ver Hagan juego, Colón…) Para muestra alcanza con decir que en el segundo tiempo y con el score adverso, los santafesinos no generaron ninguna situación clara de gol. Habrá que encontrar soluciones inmediatas para no ingresar en el siempre escabroso terreno de las especulaciones.
San Lorenzo fue más que un elenco Sabalero del que no hay aspectos positivos para destacar. Faltó tanta actitud como aptitud y la derrota de los de Mostaza fue tan justa como inevitable, esencialmente por lo que ocurrió en el complemento.
Es cierto que el hincha de Colón está acostumbrado a sufrir. Que tiene una asombrosa capacidad para soportar adversidades futboleras. Que la tolerancia a la frustración se transmite de generación en generación y la identidad se construye con ciertos desencantos y el sentido de pertenencia también se alimenta de derrotas… pero conviene no abusar de tanta generosidad, porque con actuaciones como las que mostró el equipo este sábado, todo se hace cuesta arriba y más complejo de remontar.
Es atendible la superioridad si el vencedor es nada menos que el último Campeón de América. Incluso, sobran los atenuantes para un Colón en plena etapa formativa de un torneo “extra large”. Uno reclama paciencia, trabajo y fundamentalmente capacidad para revertir esta imagen ojerosa de la primera fecha. Sí se deberá entender que el temperamento y el carácter son innegociables, no se entrenan, de origen van impregnados en los colores de esta camiseta y no pueden faltar, al menos para hacer más decorosa la derrota cuando le toque en suerte, como ocurrió en este olvidable estreno 2015 en el Nuevo Gasómetro.