Miles de egipcios pidieron la renuncia de la junta militar durante una procesión fúnebre

Decenas de miles de egipcios se manifestaron este martes exigiendo la renuncia de la Junta militar durante una multitudinaria procesión fúnebre por cristianos muertos el fin de semana en enfrentamientos en El Cairo.

Miles de cristianos desbordaron desde este lunes por la noche la Catedral Copta de El Cairo mientras se rezaban oraciones por las víctimas presididas por asistentes del papa Shenouda III, el líder espiritual de los coptos, como se denominan los minoritarios cristianos egipcios.

Las plegarias fueron interrumpidas varias veces por gritos de "abajo con la dictadura militar" y otros eslóganes contra el gobierno, al que la Iglesia copta responsabilizó este lunes de la violencia del domingo, que dejó 26 muertos y 550 heridos.

"El pueblo quiere derrocar al mariscal", cantaban las personas en referencia al mariscal de campo Hussein Tantawi, jefe de la Junta militar que tomó el poder tras la caída del ex presidente Hosni Mubarak por una revuelta popular, en febrero.

Los enfrentamientos del domingo a la noche se extendieron en una vasta zona del centro de El Cairo e involucraron a cristianos, musulmanes, policías y soldados.

Los choques comenzaron cuando unos 1.000 cristianos trataron de realizar una sentada pacífica frente al canal de TV estatal, ubicado sobre la ribera del Nilo, para protestar por el reciente ataque a una iglesia.

Los manifestantes aseguraron que fueron atacados por "matones" con palos, y que la violencia se desató con mayor fuerza luego de que vehículos militares blindados que iban a la carrera se subieran a la vereda y atropellaran a varios cristianos.

La Junta, por su parte, lanzó una firme advertencia de que planea reprimir futuras protestas.

En un comunicado, el Supremo Consejo de las Fuerzas Armadas dijo que tomará "las precauciones necesarias para estabilizar la seguridad" y usar todo el peso de la ley contra quienes se involucren en hechos violentos, ya sea por participación directa o incitación, informó la cadena de noticias CNN.

Luego del servicio en la catedral, un pequeño grupo de manifestantes marchó a la céntrica plaza Tahrir acompañando el cuerpo de Mena Danial, un joven de 20 años muerto en los disturbios del domingo.

Amigos de Danial dijeron que la víctima quería que su funeral se celebrara en la plaza Tahrir, que fue el epicentro de las protestas que provocaron el derrocamiento de Mubarak.

Informes forenses publicados este martes en la prensa egipcia mostraron que Danial murió de un disparo, y que la mayor parte del resto de las víctimas falleció también por tiros o atropellada por vehículos.

Los muertos cristianos fueron enterrados en el cementerio copto del barrio 6 de Octubre, en el oeste de El Cairo.

Los cristianos, que son el 10% de los 85 millones de egipcios, acusan a la Junta de ser demasiado indulgente con aquellos responsables de una ola de ataques contra cristianos registrada desde el derrocamiento del ex presidente Mubarak.

La caída dio lugar a un proceso de transición muy desordenado y tenso, y la minoría cristiana está particularmente preocupada por las demostraciones de fuerza de los fundamentalistas islámicos de Egipto, conocidos como salafistas.

En semanas recientes hubo disturbios en dos iglesias del sur de Egipto, entre ellas en una cercana a la ciudad de Aswan incluso después de que autoridades del templo accedieran a una exigencia de salafistas de retirar cruces y campanas del edificio.

La violencia podría llevar a los militares a reforzar su control del país, según analistas.

La Junta, dirigida por el mariscal Tantawi, ministro de Defensa de Mubarak durante 20 años, prometió tras la caída del ex mandatario que entregaría el poder en seis meses, pero el plazo se venció.

La Junta dijo este mes que habrá elecciones parlamentarias a fines de noviembre, y que si todo va bien también se celebrarán comicios presidenciales dentro de un año.

En Washington, la Casa Blanca informó este lunes que el presidente Barack Obama está "profundamente preocupado" por la violencia en Egipto y llamó a la moderación a todas las partes.

"Estos eventos trágicos no deberían interponerse entre elecciones oportunas y una continua transición a una democracia que sea pacífica, justa e inclusiva", agregó el parte norteamericano.

La Unión Europea (UE) condenó la violencia y exhortó a la Junta egipcia a garantizar la libertad de culto y proteger a las minorías.