La familia de Yamila Ferré denunció penalmente a Salud y al municipio
Dicen que en el hospital Sayago le diagnosticaron gripe y no le dieron la atención adecuada. Y que el municipio no le proveyó guantes ni barbijos para limpiar las zanjas, luego de la inundación. El Ministerio recién hoy emitió un comunicado donde confirma el caso y asegura que “investiga el proceso de atención”.
Los papás de Yamila Ferré, la joven de 23 años que falleció este lunes de leptospirosis, acercaron a la Redacción de El Litoral la denuncia penal que presentaron esta mañana contra el Ministerio de Salud y la Municipalidad de Santa Fe. Lo hicieron con el patrocinio del Dr. Luis Hilbert ante el Fiscal Regional, Ricardo Fessia.
En el escrito, firmado por Ana María Ferré (la mamá), se describen paso a paso las últimas semanas de Yamila, desde que empezó a sentir los primeros síntomas (fiebre, dolor de cabeza y decaimiento) hasta que finalmente murió en el sanatorio Garay. Cuenta que luego de atenderla le diagnosticaron síntomas de gripe y la medicaron con ibuprofeno. “Siguió con los mismos síntomas y en fecha 14 de marzo volvió al Sayago y le dijeron que seguía el cuadro de gripe, y con posible neumonía, que vaya a su domicilio, haga reposo y siga con las pastillas recetadas”, agregó.
Cuando decidieron trasladarla al hospital Cullen, Yamila estaba “bastante desmejorada, con suero... no podía respirar, pero lo que me llamó mucho la atención era que tosía con sangre”. En el Cullen les dijeron que el estado de la joven era “crítico” y como no había camas disponibles la derivaron al sanatorio privado. “Nunca más pude hablar con mi hija, ya que estaba inconciente y con una máscara para poder respirar”, relató Ana María. En el Garay le confirmaron el resultado positivo de leptospirosis.
Contra la Municipalidad
La mamá relata en la denuncia que cuando el agua inundó los barrios, su hija “realizaba trabajos de limpieza de cunetas para que el agua escurra, con el único elemento que la Municipalidad le proveía, que era un par de botas y una pechera”. Y aclara que “no se le proveyó de elementos de seguridad, como barbijo, guantes y ropa adecuada”.
En el escrito presentado, afirma, además, que “pese a estar inundada y haber pasado gran parte de los días en el agua contaminada no hubo autoridad oficial que le reparta medicamento o pastilla para prevenir la enfermedad”. Ahora requieren las historias clínicas de los tres centros de salud donde estuvo internada.