Estrenan "Silvia", de Paula Kuschnir

Hoy a las 18 se estrena en el Cine Belgrano con entrada libre y gratuita la película “Silvia”, un filme que cuenta con el apoyo del INCAA y otorga valor a una importante causa.

-¿Cómo y cuándo surge la idea de hacer “Silvia”?
-La película surge a partir de la necesidad de visibilizar la causa, considerando que desde el principio fue un caso complejo y muy poco "levantado" por los medios locales, provinciales y hasta nacionales. Un año después de su asesinato, los cumpas del Espacio de Verdad y Justicia por Silvia Suppo me proponen que hagamos con Wayruro Comunicación Popular (el colectivo audiovisual que integro desde hace 8 años en Jujuy y con el que producimos documentales vinculados a los DDHH) un documental que sirva para hacer circular y conocer la causa de Silvia. Pero no nos quedamos conformes con esa producción y decidimos ir por una película que fuera más allá de la causa. Un documental que pudiera sintetizar y mostrar además otras dimensiones de Silvia, despegarla del expediente y restituirle sus dimensiones humanas, de mujer, amiga, compañera, abuela, su sensibilidad y politicidad. Presentamos el proyecto en la "Quinta Via", una de las líneas de fomento del INCAA, en 2012 y al año siguiente nos informan que nos han otorgado el subsidio a la producción. Lo que significa un apoyo económico, político y de legitimidad muy importante.

-¿Cómo fue el proceso desde su inicio a estos días?
-Fue un proceso largo, intenso, de muchísima investigación, rastreo de material de archivo familiar e íntimo de Silvia, de Rafaela, y también de la época. Además del asesoramiento y consulta permanente con mis compañeros de Wayruro y con colegas del mundo audiovisual, realizadores con mucha más experiencia que generosa y desinteresadamente dedicaron tiempo y esfuerzo para aportar cuestiones narrativas y de construcción del relato cinematográfico. Virna Molina, Nicolás Batlle, Miguel Pérez (director de la República perdida), Marcel Czombos. Luego vino el rodaje, 10 días intensos de filmación y producción de entrevistas y realización de imágenes. Y posteriormente un tiempo de decantación de todo ese material que es muchísimo. Hubo que dejarlo descansar, tomar un poco de distancia para volver a la etapa de montaje. Fue muy complejo y largo montar más de 30 horas de filmación y condensarlos en 70 minutos. Ahí fue fundamental el aporte y la mirada externa de otro colega, Franco Cruz, quien hizo un primer corte, y después el trabajo profundo y comprometido de Adrián Ogando (compañero de Wayruro), quien hizo un montaje más fino, editó , cortó, pegó, creó y se dedicó a postproducir los audios, el color, la música.

-¿Dónde filmaron y quiénes participan?
-Filmamos en Rafaela, Santa Fe capital y Pilar, con la participación de familiares, amigos, compañeras de celda de Silvia de aquella época, personas que la conocían, integrantes del Espacio Verdad y Justicia por Silvia Suppo y hasta pudimos contar con la mirada de Pablo Llonto (abogado y periodista) que estuvo en Rafaela en marzo del año pasado, por las actividades organizadas desde el Espacio Verdad y Justicia por Silvia Suppo. Lamentablemente por la duración de la película (70 minutos) han quedado muchos testimonios afuera, y de los que aparecen, hemos tenido que incorporar sólo una parte.

-¿Cuál es la intención de este filme?
-Con este documental queremos visibilizar a Silvia. Mostrarla, que no sea sólo un nombre, un expediente, una causa, una pancarta, que vaya más allá y se comprenda que era una persona como cualquiera de nosotros. Que luchaba todos los días desde su bajo perfil por un mundo mejor, que lo hizo en los 70 y lo siguió haciendo hasta el día de su muerte. Quizás sea darle una responsabilidad demasiado grande a una película, porque es sólo una versión posible. Buscamos que nos llene de preguntas para que también nos sumemos a la búsqueda de la verdad, para que nos incomode saber que hay una rafaelina que después de cinco años, sigue sin encontrar justicia.

-¿Cómo repercute la película en la agrupación Verdad y Justicia por Silvia?
-Para el Espacio es una herramienta de visibilidad y difusión de la causa, la idea es que se la trabaje en las escuelas, centros culturales, y todos los espacios en que sea posible proyectarla para que se conozca la causa. Los cumpas del Espacio participaron muy activamente en la producción de esta peli porque tiene que ver con la lucha que ellos encabezan y siguen, que es la lucha en la calle, desde el arte, desde la vida, desde la esperanzas, que es el mejor legado que pudo habernos dejado Silvia a todos, el de la apuesta a la transformación social.

-¿Cómo fue el proceso de rodaje?
-El proceso de rodaje fue super intenso porque contábamos con muy poco tiempo (los cumpas son de Jujuy) e hicimos este viaje especialmente para filmar, y los entrevistados eran muchísimos. Laburamos entre 10 y 12 horas por día para llegar a todo lo propuesto, y lo hicimos. El montaje fue una etapa dura, porque es muy fuerte la historia y me atraviesa de manera muy directa, no soy la misma que inició este proceso hace dos años, ninguno lo es. Pero en mi caso estoy todavía más convencida que es desde el arte -en este caso el cine- desde donde podemos hacer la apuesta diaria, desde donde podemos llegar a muchísimas más personas que se sensibilicen y sumen en la búsqueda de justicia por Silvia, por todas las Silvia que hay por nuestros días. Agradezco muy especialmente a Marina y Andrés, los hijos de Silvia, a Hugo su hermano, y a los cumpas del Espacio, Chola y Lichi, que no dejaron de sumar información y datos hasta el día del estreno. Gracias a todos los que no aparecen en la peli pero están y estuvieron siempre, y a mis viejos y familia que me bancaron en todas.

-¿Cuáles son tus expectativas a futuro?
-Que se vea, circule, se muestre en todas las pantallas y espacios de la ciudad, de la provincia, del país y del mundo. Vamos a mandarla a muestras, festivales y ventana (canal) donde pueda emitirse.