El Gobierno desmiente que haya malestar de Mujica con la Presidenta

Tras reunirse con el canciller del país vecino, Timerman negó "supuestas trabas" a un acuerdo bilateral, pero admitió que hay "aspectos técnicos observados".

Timerman y Almagro, en uno de sus últimos encuentros en Buenos Aires. Foto: Archivo
ROMA.- El canciller argentino, Héctor Timerman, desmintió hoy cualquier tipo de conflicto con Uruguay debido a la implementación del pliego de licitación del dragado del canal Martín García.

Luego de que La Nación informara sobre la existencia de roces entre los países vecinos por este tema, Timerman aprovechó la V Conferencia Nacional Italia-América Latina y el Caribe, organizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Italia, para reunirse con su par uruguayo, Luis Almagro, presente en esta capital para participar en el mismo foro. La reunión no estaba en la agenda, sino que se organizó luego de la información publicada sobre un malestar del presidente José Mujica con el Gobierno.

En este encuentro, Timerman y Almagro trataron temas vinculados a la agenda bilateral, entre ellos, el trámite para la implementación del pliego de licitación del dragado del Canal Martín García, según indicó un comunicado de la Cancillería.

"Los cancilleres reiteraron el absoluto compromiso de ambos gobiernos en dar cumplimiento a las obras acordadas. Los aspectos técnicos observados, que hacen al dragado de 4 kilómetros de suelos pedregosos dentro de un proyecto total de 110 kilómetros, serán superados en breve", indicó el texto.

"Los ministros no dudan que el dragado a realizarse, luego del llamado a una licitación internacional, cumple fielmente con los acuerdos aprobados por los presidentes de ambos países", agregó. "Asimismo, ambos cancilleres desmienten la información de prensa sobre supuestas trabas al acuerdo bilateral, publicada con el objetivo de incidir negativamente en la excelente relación entre la Argentina y Uruguay", concluyó el comunicado.

Antes de esta reunión, al pronunciar un discurso en el salón de conferencias de la Farnesina -el imponente edificio de arquitectura de la época de Mussolini, sede de la cancillería itálica-, Timerman destacó el relanzamiento de la relación con Italia.

"Para mi país este 2011 ha marcado el relanzamiento de las relaciones entre la Argentina e Italia, en cuanto éstas habían sido seriamente afectadas por las consecuencias financieras de la crisis argentina de principios de la década pasada", dijo. Aludió así, sin mencionarlo, al conflicto por los bonistas -el reclamo de 500.000 pequeños ahorristas que habían comprado títulos de deuda argentina caídos en default-, que hizo precipitar en su nivel más bajo la relación bilateral. Se trata de una tema hoy medio solucionado con dos canjes, pero aún conflictivo: hay un grupo de bonistas que sigue intentando recuperar su dinero, entre ellos, la Task Force Argentina, que lidera Nicola Stock, que ha presentado un recurso contra la Argentina ante el Ciadi, el tribunal del Banco Mundial.

"En un año de intenso trabajo con el canciller Frattini, entre las mutuas visitas oficiales que realizamos y encuentros en foros multilaterales, hemos logrado importantes progresos celebrando acuerdos trascendentales en materia política, económica y de derechos humanos", indicó el canciller argentino.

Tras recordar la visita de la Presidenta al país en junio pasado para participar de los festejos por el 150 aniversario de la unidad de Italia, el canciller pasó a subrayar el proceso de integración que ha tenido América latina en los últimos años y su importancia como bloque en este momento de inmensa incertidumbre económica global.

"Considero que los tiempos actuales están signados por dos circunstancias inéditas: la primera de ellas se refiere a que Sudamérica atraviesa el período de integración más intensa que se conozca y, en segundo lugar, que ello ocurre durante una crisis económica global que por primera vez encuentra en los países en desarrollo como el motor del crecimiento mundial. Estos dos hechos definen la relación actual y futura entre nuestros dos continentes", aseguró.

Timerman, que ayer por la mañana visitó al cuartel general de la Comunidad de Sant'Egidio (presente en la Argentina), esta tarde tuvo una reunión con el rabino jefe de Roma, Riccardo Di Segni.