Ya son tres los muertos por el temporal en el Gran Buenos Aires
Un hombre fue hallado muerto hoy en su casa inundada en Quilmes, mientras un padre y su hijo eran buscados en el Riachuelo, adonde cayeron con su auto en medio del temporal de lluvias, a la vez que cientos de personas seguían evacuadas y se suspendieron las clases en Mar del Plata.
En el quinto día del temporal que mantiene en alerta a varias localidades bonaerenses, del sur de Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba, el panorama seguía complicado en los alrededores del Gran Buenos Aires por las inundaciones que afectaron a distritos como Luján, Pilar, Avellaneda, Bernal y San Francisco Solano, entre otros.
En ese marco, los bomberos voluntarios de Villa La Florida, en Quilmes, confirmaron a DyN que en la mañana de hoy rescataron el cadáver de un hombre "mayor de 60 años" de su casa, que estaba inundada y es "aledaña al arroyo" las Piedras, que desbordó.
Con el deceso de este hombre, de apellido Benítez, se elevó a tres las cantidad de víctimas mortales desde que empezaron las lluvias, dado que el jueves un arroyo arrastró a un niño de 11 años en Pilar y el sábado murió un adulto de 39 años que se resistía a dejar su casa en Campana por temor a robos.
En tanto, buzos y agentes de Prefectura Naval buscaban en el Riachuelo, a la altura del puente Bosch, en Avellaneda, a Juan Ramón Bruera y su hijo de 15 años, quienes desaparecieron anoche al caer con su automóvil a las aguas del río durante el temporal.
Los buzos lograron recuperar esta tarde el Volkswagen Fox gris en el que los Bruera iban desde Avellaneda para llevar a familiares que participaron de una cena en su casa, cuando en una mala maniobra en la calle aledaña al río el vehículo derrapó y cayó al Riachuelo cerca de las 22 del domingo.
Asimismo, en la ciudad de Arrecifes los bomberos voluntarios rescataron a dos hombres que sufrían principio de hipotermia cuando se encontraban en el techo de sus casas, en el barrio Los Quinchos, adonde se habían quedado para custodiar sus bienes en medio de las inundaciones, por temor a los robos.