“Hay que tomar esto como una alarma y modificar el sistema de votación"

El analista político opinó que con experiencias como las de Tucumán “perdemos todos; no hay nadie que gane”. También sostuvo que “no podemos votar en el siglo XXI como lo hacíamos en el siglo XIX”.

El ex director de Poliarquía, Sergio Berensztein, evaluó que el conflicto de Tucumán “tiene naturaleza local pero implicancias nacionales, porque las irregularidades en el proceso de votación está en duda en otros distritos”, y agregó que en conjunto, todo ello “empaña la transparencia y la credibilidad. Incluso la legitimidad de origen del propio presidente”.

Por eso, para Berensztein en este camino “perdemos todos, porque es Argentina. Acá no hay nadie que gane, porque el que gane con duda va a ser un presidente recontra débil “.

Asimismo, advirtió que “el sistema democrático está entrando en una etapa de pérdida de credibilidad”, y que allí radica la gravedad de la cuestión. “En la larga decadencia institucional que tiene la Argentina no habíamos llegado nunca a estos niveles de fragilidad. Lo electoral hasta ahora había estado fuera del desgaste y de la manipulación de las instituciones. Argentina mentía en las estadisticas y manipulaba el gasto público, pero no se mentía en los votos de manera tan grosera”.

El especialista remarcó que “lo importante es tomar esto como alarma de magnitud y modificar el sistema de votación. No podemos estar votando en el siglo XXI como votábamos en el XIX. La idea de lista sábana y las irregulareidades que acompañan a las elecciones en la Argentina son intolerables”.

No obstante, Berensztein rescató la actitud tomada en las últimas horas por la Cámara Nacional Electoral , que consideró que “reaccionó a tiempo” al disponer “más de 30 medidas orientadas a generar obstáculos para quienes pretendan manipular la soberanía popular”.
Finalmente, advirtió que “lo importante es preguntarnos si queremos seguir viviendo en democracia, qué significa eso y definir un sistema de votación acorde con la tecnología del momento y con la vocación de la sociedad argentina de votar transparentemente”.