El titular de la Asociación Civl Don Pedro de Avellaneda, Gustavo Lebus, relató que este domingo se encontraba trabajando en la institución cuando, alrededor de las 8:45, dos jóvenes que pasaron caminando le advirtieron que no llamara más a Gendarmería porque la próxima le iban a me van a prender fuego el automóvil. A los dos sujetos él los había sindicado ante las fuerzas de seguridad como vendedores de droga. “Ni siquiera pararon. El mensaje fue corto y claro”, indicó el también ex concejal.

“Yo vengo trabajando con las autoridades policiales y con la Gendarmería por este flagelo que está plagando mi barrio”, comentó. “Es preocupante porque son chicos de mi barrio, los conozco a todos. Soy uno de los primeros habitantes de este sector y son familias amigas”, se lamentó, y explicó: “yo nunca aporté datos, nombres y apellidos, pero sí vengo presionando a esas autoridades por la cantidad de droga que hay”.

Lebus señaló que el intendente, el presidente del Concejo de Avellaneda y funcionarios del Ministerio de Seguridad se comunicaron para solidarizarse con él y comprometerse a una reunión próxima. En ese sentido, evaluó que lo ocurrido “ha tomado una repercusión interesante”, aunque relativizó la trascendencia de esto último, al opinar que “lo importante es que podamos solucionar esta situación. Más allá del apriete, lo preocupante es lo que nos está pasando como sociedad: la droga, concretamente, la que se está moviendo en el barrio. En Avellaneda, en Reconquista, en toda la comunidad. Esperamos poder erradicar o por lo menos bajar los niveles de impunidad que están teniendo estos chicos”, finalizó.