La conducción de la Unión Industrial (UIA), que lidera José Ignacio de Mendiguren, decidió apurar los tiempos en la búsqueda de establecer un marco de referencia y ciertos límites de cara a la negociación salarial de 2012 y para eso comenzó a gestionar un encuentro con Hugo Moyano y los principales referentes de la cúpula de la CGT, el que podría concretarse en los próximos días, según confirmaron importantes dirigentes de la entidad fabril.

La idea de iniciar una ronda de diálogo con la primera línea de la central obrera para avanzar en consensos sobre las próximas paritarias es impulsada por De Mendiguren, quien en declaraciones realizadas durante el fin de semana advirtió que “si no se pacta un marco a la puja distributiva, esto termina mal”, en clara referencia a la necesidad de reducir las expectativas inflacionarias.

La advertencia del titular de la UIA se produjo horas después de que el propio Moyano salió al cruce de las versiones acerca de que el Gobierno, con apoyo de los sectores empresarios, intentaría fijar un tope inferior al 20% para los aumentos salariales de 2012, una alternativa que el líder camionero rechazó de plano y alertó con un escenario de mayor conflictividad si se avanza en ese objetivo.

En medio de esos cruces, un importante referente de la cúpula industrial confió ayer a este diario que De Mendiguren se reunirá con el jefe de la CGT apenas retorne al país tras su gira por Armenia. “El objetivo es empezar a hablar el tema salarial”, indicó el industrial, quien se mostró expectante con la posibilidad de diálogo con los representantes gremiales.

A su vez, cerca de Moyano indicaron que “algo hay, pero ninguna fecha en concreto” respecto de las gestiones de la conducción industrial para reunirse con el líder cegetista y avisaron que aguardarán una convocatoria “formal” para encarar cualquier tipo de negociación. “Por ahora no hay fecha ni nada concreto, vamos a esperar porque tampoco sabemos cuál sería la agenda de diálogo”, apuntó un miembro del consejo directivo de la central obrera en diálogo con El Cronista.

Dentro de la CGT consideran que la intención de un encuentro conjunto es alentada por De Mendiguren con el propósito de establecer algún parámetro de referencia con vistas a las paritarias de 2012, una alternativa que dentro de la central obrera evalúan con cierta desconfianza. “Todavía falta mucho para discutir los aumentos, no se pueden fijar hoy porcentajes”, señaló el sindicalista, quien se mostró poco entusiasmado con la idea de renovar el impulso por un eventual acuerdo social. “Eso ya fue, no se concretó en su momento, no creo que se pueda hacer ahora”, especuló.

El propio Moyano reaccionó desafiante en las últimas horas cuando lo consultaron sobre la posibilidad de acortar algún tope para los aumentos de sueldos del próximo año y advirtió que si esa es la estrategia avalada por el Gobierno y los empresarios “las paritarias están de más”. “Si hay un límite vamos a tener que discutir, entonces, la inflación, el mínimo no imponible, el salario mínimo, vital y móvil, y los topes para el cobro de las asignaciones familiares”, alertó el camionero.

Para contener el malestar moyanista, De Mendiguren intentó aclarar que el objetivo industrial no apunta al de fijar topes para la recomposición salarial, sino consensuar “un marco de referencia en el que con racionalidad y dependiendo de las realidades de cada sector se llegue a acuerdos sensatos que no ahuyenten la inversión