Otra vez Unión tropezó con su propia impotencia en los minutos finales. Otra vez el derroche de puntos antes de cerrar la historia. Pasó en la mimísima Bombonera y esta noche en el oeste santafesino. Empató 1-1 ante Rafaela por no saber liquidarlo y por no administrar el control de la pelota en el tramo final del cotejo. 

Lo primero que uno debería tener en cuenta en el análisis de los 90 minutos es que el estado del campo de juego conspiró para jugar con normalidad. Puede ser un atenuante o una excusa, porque realmente se vio poco, pero la cancha estaba fea. Advertido este detalle, no menor en el desarrollo del match, los dos equipos jugaron la pelota por las nubes y las ideas se embarraron. En el primer tiempo, la Crema tuvo más la pelota, pero las llegadas más claras fueron de la visita.  

Atlético se desvaneció ante las “barbas” de Nereo, al tiempo que el Tate desperdició dos claras con olor a gol. Primero fue Malcorra que de bolea, luego de un centro de Martínez, no pudo vencer la resistencia del arquero Axel Werner. Un par de minutos después, se vio la más clara en los pies de Gamba. El menodicno eludió un par de rivales hasta quedar de cara al gol. Gamba definió como jugó Unión la etapa inicial… muy apurado con la pelota en los pies. La tiró de zurda afuera, sin darse cuenta que junto él ingresaban solos sus compañeros Martínez y Malcorra.

Se fueron al descanso empatados, pero con los rojiblancos mejor parados y más cerca del arco de Atlético.  Y el complemento arrancó igual. Los de Madelón salieron decididos y un disparo de Gamba  desde afuera del área al minuto volvió a exigir a Werner que la mandó al corner con una estirada magistral.

Intentó reaccionar el anfitrión  pero el Tate le advirtió que si se descontrolaba corría riesgos. Lamolina anuló bien el gol de Bolzicco antes del cuarto de hora por clara posición adelantada.  Fue y no se resignó. Lo buscó y lo encontró. En una cancha apta para el remate de media distancia, Unión tuvo el gol en el empeine zurdo de su especialista. A los 23, Ignacio Malcorra por derecha, al filo del área le pegó fuerte y encontró entre tapado y mal parado al “1” rafaelino y decretó la apertura del marcador.

Más tarde, tocado en su amor propio el local fue por algo. Anselmo fusiló a Nereo con un cabezazo franco al arco Tatengue y Fernández se lució a trece del final, aunque segundos después falló en intentar descolgar un centro y García Guerreño salvó la imprevista grosería. Sin demasiados méritos pero con mucho empuje Rafaela hizo lo que Boca en la Bombonera. Lo atropelló y llegó al gol sobre la hora. Anselmo de cabeza a la salida de un tiro de esquina puso el 1-1. 

El final fue dramático porque ninguno pareció conformarse con el punto. Se descompensó el Tate y Britez vio la roja, pero en el descuento, el paraguayo Rodríguez ganó una pelota de puro guapo y quedó mano a mano con Werner… ganó el arquero. Fue la última. Otra vez sobre la hora el equipo de la Avenida dejó pasar una gran oportunidad de sumar de a tres.

En el balance general y minucioso de lo realizado por unos y otros, fue algo más la visita frente a los arcos, pero otra vez no lo supo ganar. En el cabezazo de Anselmo a dos minutos del final, está la penitencia de los rojiblancos, que siguen sin saber archivar un partido cuando está haciendo un buen negocio. Sin dudas que a la Crema le quedó mejor el resultado, por cómo lo consiguió y porque es el primer punto que suma en el año ante su gente. 

Audio: Gol de Malcorra a Rafaela