Sin extrañar al astro del fútbol mundial Lionel Messi, el equipo de Martino pudo ganar en su debut en la Copa América del Centenario que se celebra en Estados Unidos. Fue merecido 2 a 1 ante la selección de Chile que conduce el santafesino Juan Antonio Pizzi. El cotejo fue muy disputrado, duro, complicado y de ida y vuelta con mucho ritmo. Argentina pudo vengar así en parte la derrota por penales en la final del certamen continental de año pasado en Santiago.

Luego de un primer tiempo parejo, donde la albiceleste fue algo más por la postura en la cancha, en la salida de la pelota y en las pocas situaciones de gol que se generaron frente a los arcos.

En el inicio del complemento, Argentina encontró espacios por el sector izquierdo del ataque para golpear con la misma fórmula dos veces en ocho minutos. A los 5 Di María y a los 13 Banega, no solo le dieron una clara ventaja a la Selección Argentina, sino que los trasandinos quedaron golpeados y casi que no se pudieron reponer de  dos duras cachetadas.

Buen trabajo defensivo del elenco del Tata, que solo tuvo un error en la salida de Romero para despejar un centro que Fuenzalida transformò en el descuento "rojo" con un claro golpe de cabeza, a los 47 de la etapa final.  Interesante aporte de Gaitán en la dura misión de ser el reemplazante de Messi (con otras características) y una destacada labor del incansable Di María… los pilares en los que se apoyó un triunfo merecido, justo y necesario (que hasta pudo ser más amplio).

El próximo viernes el combinado nacional se medirá con Panamá, que este lunes superó a Bolivia por 2-1.

Grupo D