Argentina, con Messi, buscará su clasificación

Este viernes, desde las 22.30, el equipo del Tata Martino se medirá ante Panamá, en busca del triunfo que lo clasifique a los cuartos de final de la Copa América Centenario. La Pulga jugará como titular

La Selección Argentina se presentará este viernes por segunda vez en la Copa América Centenario ante Panamá, luego de la victoria clave de la fecha inaugural frente a Chile pero, en esta oportunidad, hay un hecho que trasciende al encuentro en sí: el capitán Lionel Messi volverá a vestir la camiseta albiceleste después de haber estado ausente en el debut.
Y si bien el equipo no pareció extrañarlo demasiado a Messi en el primer juego por la victoria en sí, pero sustancialmente porque el funcionamiento “fue el mejor de los tres últimos partidos jugados ante Chile”, según confió ayer el propio entrenador, Gerardo Martino (ver aparte), “contar con él en la cancha es tener ventaja de arranque”, advirtió el capitán ante la Roja, Javier Mascherano, quien esta noche le devolverá la cinta a la Pulga.
“Messi va a ser titular mañana  (por hoy) ante Panamá”, aclaró el Tata, en una inédita confirmación previa al partido a la que no acostumbra el técnico rosarino que, por lo demás, terminó anticipando a los otros diez que vencieron por 2 a 1 a los chilenos. Claro que, en esta oportunidad y dadas las características del rival, será “el triángulo del medio” el que cambiará su punta, ya que en vez de estar con esta hacia arriba, lo estará hacia abajo.
Esto es entonces que frente a los  dirigidos por Juan Antonio Pizzi se pararon Javier Mascherano y Augusto Fernández como un doble 5, formando la base del triángulo, y Ever Banega por delante, detrás del 9, Gonzalo Higuaín.
Ahora en cambio se quedará Mascherano solo como un 5 clásico, Fernández se abrirá hacia la derecha para recorrer más la banda como lo supo hacer en Vélez o en el Celta de Vigo (en el Atlético Madrid juega como lo hizo el lunes en el Levi’s Stadium, de Santa Clara), y Banega se correrá más sobre la izquierda, para darle un criterio más ofensivo al equipo desde la propuesta.
Claro que respecto del partido anterior no estará Nicolás Gaitán, quien frente a Chile no jugó “de Messi”, sino bien abierto por los laterales, siendo importante en el retroceso. Ahora su lugar será justamente para Lio, lo que les ofrecerá variantes a todos quienes lo rodean, empezando por Fernández, quien de movida será el que estará parado más cerca suyo.
Ante esto, Panamá buscará competir desde el resguardo defensivo y el combate en la mitad de la cancha, para lo que el técnico colombiano Hernán Darío Gómez propondrá un 4-1-4-1 para lo que saldrá un delantero, Gabriel Torres, quien acompañó al goleador Blas Pérez en el 2 a 1 sobre Bolivia en el debut en la Copa América, e ingresará un volante con despliegue y llegada, Valentín Pimentel, quien puede ser más efectivo en el retroceso.
Pérez fue el autor de los dos tantos antes los bolivianos y será el único punta, mientras que el ex-Godoy Cruz, Armando Cooper, se parará como único volante por el medio, entre las dos líneas de cuatro, aunque por características es un jugador más ofensivo.
 Es que el Bolillo intentará sumar piernas pero, fiel a su esencia de ex ayudante de campo de Francisco Pacho Maturana, no querrá resignar fútbol a la hora de tener la pelota e intentar lastimar a la Argentina con transiciones rápidas y profundizaciones por las bandas.
Panamá está bien posicionado para este encuentro después de la victoria inicial y, aunque desde el técnico hasta los propios jugadores ven como una quimera la clasificación a los cuartos de final, aún sucumbiendo ante los argentinos contarán después con una bala de plata en la 3ª y última fecha, ante Chile.
En cambio, la Argentina transita por un lecho de rosas dada las calidades de sus dos próximos rivales y sobre todo después de haber llegado a Estados Unidos con la tranquilidad de haberse reposicionado en las Eliminatorias mundialistas, aunque lo más importante para esta noche, está descontado: vuelve Messi, y la Copa América Centenario cobra vida, aunque la trascendencia del partido no vaya en consonancia.
 Es que Messi está en las tapas de los diarios de Chicago y en los afiches que promocionan el certamen en esta sede, por encima de la competencia propiamente dicha. Así, “vuelve Messi” es un título que invalida todo lo demás y alivia a la organización de un torneo que lo tiene a él como el mascarón de proa de un fútbol al que le cuesta instalarse en el alma de los estadounidenses.