Como todo artículo o comentario que involucre al final de la sexta temporada de Game of Thronesesta nota comienza con una advertencia: deje de leer ahora mismo si por alguna razón todavía no pudo ver los electrizantes 69 minutos que cerraron la serie hasta el año que viene. Porque aquí se hablará de los que ya no están, de los que cayeron en la línea de combate de la ficción más entretenida de estos tiempos.Esos actores que dieron vida a unos personajes fundamentales para los enredos familiares y dinásticos creados por George R. R. Martin y que ahora deben salir a buscar trabajo poniendo en su currículum la valiosa información de haber sido uno de los "nuevos" muertos de Game of Thrones.

Natalie Dormer. Durante cuatro temporadas fue Margaery Tyrell, la gran esperanza de la realeza. Bella, inteligente y con destellos de una humanidad que casi nadie más en su círculo mostraba, la bella reina que le jugó de igual a igual a Cersei, pero finalmente perdió la guerra. De todos modos, la actriz que la interpretó tiene una agenda bastante ocupada. En pocos meses empezará a filmar Official Secrets, una película de espías basada en un caso real en la que compartirá cartel con Harrison Ford y Gillian Anderson. Y ya terminó el rodaje del film de ciencia ficción Patient Zero en la que cuenta también participá John Bradley, más conocido como Sam Tarly, uno de los más resistentes personajes de Game of Thrones.

Finn Jones. Aunque durante la sexta temporada su personaje no hizo más que sufrir y pocos imaginaban que podría sobrevivir a la crueldad del Gorrión Supremo, lo cierto es que el actor que interpretó a Loras, el heredero de la casa Tyrell, ya comenzó a trabajar en su próximo papel. Jones fue elegido para protagonizar la nueva adaptación de Marvel para Netflix: Iron Fist. En la serie, que se estrenará el año que viene y que ya se está grabando,el actor británico interpretará Danny Rand, un hombre experto en artes marciales que regresa a la ciudad de Nueva York dónde se verá obligado a poner en práctica sus místicos poderes como Iron Fist.

Dean-Charles Chapman. Fue el segundo Tommen. De la tercera a la cuarta temporada los productores de la serie decidieron que necesitaban a un actor un poco más maduro que Callum Wharry para interpretar al hermanito de Joffrey que llegaría al Trono de Hierro tras el asesinato del primero y para eso convocaron a Chapman. Y a pesar de que el actor adolescente consiguió atrapar el interés del público eso no lo salvó de la muerte. Ahora Chapman participará de la miniserie de TNT Will, que imagina la juventud de William Shakespeare.

Jonathan Pryce. El veterano del cine, el teatro y la TV británica seguramente sabía que sus días como el manipulador y poderoso sumo sacerdote de los Siete no serían demasiados. De todos modos, antes de su explosivo final, consiguió mantenerse en pie por dos temporadas y doce episodios. Mucho tiempo más que otros que se atrevieron a desafiar a Cersei Lannister. Próximamente, probablemente en septiembre, Pryce aparecerá en la serie Taboo, una gran producción de época protagonizada por Tom Hardy.

David Bradley. Alguno lo habrá reconocido hace tiempo como Argus Filch, el malvado y malhumorado celador de Hogwarts en los films de Harry Potter. Parece que cada vez que se necesita a un señor mayor, algo siniestro y desharrapado, Bradley está primero en la lista de los productores. Si no basta con verlo en la primera temporada de la miniserie Broadchurch. Claro que, a diferencia de Argus, que apareció en las ocho películas dedicadas al joven mago, su personaje en Game of Thrones no pudo sobrevivir a la venganza de Arya Stark. Y para sacarse de encima al desagradable Frey, Bradley aparecerá en la tercera temporada de The Strain repitiendo su papel del cazador de vampiros Abraham Setrakian.