Día de la Radiodifusión Argentina
¿Sabías que quizás la primera transmisión radial del mundo se hizo en nuestro país? ¿Conocés a “los locos de la azotea”? ¿Cuántos años tiene este medio? Enterate de todo en esta nota y escuchá aquella primera transmisión.
El 27 de agosto de 1920, el radioaficionado Enrique Telémaco Susini, con su grupo de amigos y un sobrino (César Guerrico, Luis Romero Carranza y Miguel Mujica) transmitieron la ópera Parsifal de Wagner desde la terraza del Teatro Coliseo, en la calle Cerrito y Charcas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Son 31 años más que la primera transmisión televisiva local, 38 más que el desembarco de la televisión color, 49 más que la prehistoria de Internet. Y 77 más que la fundación de Netflix. Ancianidad, vigencia y resistencia de esto que muchos aseguran es un invento argentino más.
Según algunas versiones, hubo emisiones en otros países previamente, pero fueron experimentales. Otros afirman que el estadounidense David Sarnoff y el italiano Guillermo Marconi ya habían realizado proezas similares a la de “los locos de la azotea”, así bautizados por ser vistos como “raros” para la época (como podrían ser ahora los YouTubers o a los creadores de la aplicación de caza de pokemones).
La ópera transmitida estaba interpretada por la soprano argentina Sara César y el barítono Aldo Rossi Morelli. Al cumplirse medio siglo de aquél día, el gobierno nacional estableció el 27 de agosto como Día de la Radiodifusión.
Susini, el cráneo
El puntapié de la radiofonía argentina, hace 96 años, se lo debemos a un otorrinolaringólogo entrerriano. Hijo de un cónsul argentino en Viena, don Enrique Telémaco Susini hizo peripecias para colocar antenas en edificios. Niño bien, "Enriquito" había viajado a Francia, a estudiar “los efectos sobre las vías respiratorias de los gases asfixiantes de la Guerra”, y había vuelto con extraños chiches nuevos: equipos de radiocomunicaciones.
El juego inocente del 27 de agosto marcó un quiebre en épocas en que no existía ni el Obelisco. 1920, momento en que en paralelo se desarrollaban los Juegos Olímpicos de Amberes (Bélgica) y que transcurría la presidencia de Hipólito Yrigoyen. Por entonces, Niní Marshall (futura estrella de la "cajita feliz"), recién terminaba su bachillerato en el Liceo Nacional de Señoritas.
La bendita primera cinta todavía circula democráticamente por las redes sociales y los archivos. El propio Telémaco empuñó el micrófono y grabó su voz para siempre: “Señoras y señores, la Sociedad Radio Argentina les presenta hoy el Festival Sacro de Ricardo Wagner, Parsifal…”, se escucha.
Sea o no el creador de la radiofonía a nivel mundial, lo cierto es que nuestro paisano Susini tuvo un cráneo milagroso. Por algo Einstein lo definió como “una de las primeras inteligencias de la Argentina”.