Las fuerzas iraquíes entrarían en Mosul en las próximas horas

Afirman que sólo les queda una localidad por conquistar antes de tomar posición en la periferia este de la ciudad iraquí.

A las fuerzas iraquíes sólo les quedaba el lunes una localidad por conquistar antes de tomar posición en la periferia este de Mosul, el bastión del ISIS, presionado por todos los frentes.

La ofensiva contra la segunda ciudad de Irak entró en su tercera semana y decenas de localidades situadas en las llanuras de sus alrededores fueron arrebatadas a los terroristas con el apoyo de la fuerza aérea y de la artillería de la coalición internacional liderada por Washington.

Las fuerzas iraquíes todavía no han entrado en la aglomeración de Mosul, indicó el lunes un responsable militar iraquí, desmintiendo informaciones que daban cuenta de este supuesto avance.

"No hemos entrado en el barrio de Al Karama (en el este de Mosul), nuestras fuerzas están en el pueblo de Gogjali, a 2,5 kilómetros de allí", explicó a la AFP Abdelwahab al Saadi, un alto jerarca del Comando Antiterrorista Iraquí (CTS), una fuerza de élite, que opera en el frente este de la ofensiva.

Gojali era, junto con la localidad de Bazwaya, uno de los dos objetivos que se habían fijado para este lunes las CTS, que avanzan desde el este de la ciudad de Bartalla.

Bazwaya fue retomada y si Gogjali cae, "esta noche, estaremos a 700 metros de (la aglomeración de) Mosul", indicó un responsable militar del CTS, Muntadhar al Shimmari, cuyos efectivos y sus convoyes de vehículos blindados ligeros enfrentan los disparos de mortero de los terroristas.

Desde el 17 de octubre, decenas de miles de miembros de las fuerzas de seguridad avanzan en los frentes este, sur y norte.

Unidades paramilitares dominadas por milicias shiítas se sumaron con el lanzamiento de una ofensiva desde el oeste para que los yihadistas no puedan moverse libremente entre Mosul y la frontera siria.

La coalición internacional anunció el viernes que las fuerzas iraquíes harían una "pausa" de dos días para consolidar sus primeros triunfos territoriales y reposicionarse.

Las fuerzas kurdas reconquistaron algunas localidades al norte y al este de Mosul, lo que les permitió consolidar esas posiciones, mientras que en el sur las fuerzas federales suben por el valle del Tigre pero están aún lejos de los bordes de la ciudad donde el ISIS proclamó su "califato" en 2014.

Combatientes de las Unidades de Movilización Popular (Hashd al Shaabi), una coalición de milicias shiítas apoyadas por Irán, acaban de lanzar una ofensiva al oeste de Mosul.

Su objetivo es retomar Tal Afar y cortar la línea de abastecimiento yihadista que enlaza Mosul con la frontera siria. Oficialmente, estas fuerzas no participarán a la liberación de Mosul, donde la comunidad sunnita es mayoritaria.

Algunos de sus comandantes, sin embargo, no lo ven de la misma manera.

Estas milicias fueron acusadas de ataques religiosos en zonas sunnitas previamente liberadas del yugo yihadista, como Fallujah o Ramadi, al oeste.

Cuando estén posicionadas alrededor de Mosul, las fuerzas iraquíes deberían iniciar un sitio y tratar de abrir corredores para facilitar la evacuación de los habitantes, que los yihadistas utilizan como "escudos humanos".

Después deberán librar una guerra urbana contra 3.000 y 5.000 yihadistas, según las estimaciones estadounidenses, atrincherados en la aglomeración que cuenta alrededor de 1,5 millones de habitantes, según Naciones Unidas.

Los desplazamientos de civiles no son por ahora masivos, pero las organizaciones humanitarias prevén que se intensificarán cuando las fuerzas iraquíes entren en la urbanización.

Más de 17.000 personas abandonaron sus casas en estas dos semanas de ofensiva militar y el Consejo Noruego para los Refugiados (NRC) asegura que por ahora no quedan más que 55.000 lugares disponibles en los diversos campamentos.

En las localidades retomadas al ISIS, algunos civiles intentan retornar a una vida normal luego de dos años de dominación yihadista pero la mayoría de esos sectores todavía no son habitables. Se necesitarán meses en algunas zonas para extraer las minas y reconstruir.

Foto: AFP.