El presente por el que está pasando Huracán no es el adecuado, ya que luego de perder a su entrenador con el que inició la temporada (Eduardo Domínguez), llegó Ricardo Caruso Lombardi, y hasta ahora, los resultados no aparecen y el descenso comienza a preocupara, ya que en la tabla de los promedios se ubica en el 26° puesto, en un torneo dónde descienden cuatro equipos de 30. Además, el equipo de Parque Patricios se entrenará a puertas cerradas y no habrá atención a la prensa hasta nuevo aviso.

Tal decisión fue justificada por su entrenador, que se enojó con los periodistas: "No hay misterios, pero si vos mandás a los periodistas para meter púa y hacer maldades, entonces no, vamos a cortar por lo sano y que me critiquen si quieren. Que hablen conmigo, con los jugadores que no hablen y listo". Y se mostró enojado por una nota que se le realizó a Ignacio Pusseto. "No me gusta que le den manija a los jugadores y los rosqueen con mentiras. Meten púa, como a Pusseto, que le preguntaron '¿qué pensas de Caruso que dijo que el club no es para él y se quiere ir'? y eso es con maldad, no es una pregunta normal; una pregunta normal es 'Ricardo dijo que piensa que el club no es para él por su mala suerte...'.

"Dije que estos tres partidos van a marcar mi destino por una cuestión lógica y de ética. Si yo juego bárbaro y no gano nunca, no le sirve ni a los dirigentes, ni a los jugadores ni a mi", expresó Caruso en declaraciones con Crack Deportivo, evidenciando sus resultados, ya que solamente cosechó cinco puntos en siete partidos, a pesar de merecer más.

Y deslizó: "No hay virtud de los rivales, no es que nos manejan la pelota o nos pasan por arriba, más o menos nos quedamos conformes. No podemos ganar, por más que nos lamentemos, no podemos meterla". Por último, se refirió a su frase post derrota ante River ("Huracán no es para mí"), y aclaró: "No dije nada raro, nunca me arrepiento de lo que digo porque soy consciente cuando hablo, no hablo en caliente. Suena chocante, pero no ponen que lo dije por mi mala suerte".