Así empezó la nueva temporada de The Americans
La serie centrada en un matrimonio de espías sigue firme entre lo mejor de la televisión actual
A pesar de contar con una verdadera galería de críticas que la recomiendan,The Americans sigue siendo, por estas latitudes, una serie a descubrir. La ficción protagonizada por Keri Russell y Matthew Rhys , en la que componen a un matrimonio de espías rusos que, durante la guerra fría, llevan una doble vida en suelo americano, es la perfecta combinación entre suspenso, acción e incluso drama familiar. Y por este motivo es que esta historia es de lo más ambicioso que puede encontrarse en la actualidad, planteando una serie de juegos, conspiraciones y personajes de doble e incluso -como se vio en el primer episodio de la quinta temporada- triple personalidad.
Una nueva cara para los Jennings
"Amber Waves", el nuevo episodio de la serie, comienza con música de Devo y mostrando un día común en un colegio secundario. Allí la cámara se posa sobre un muchacho de rasgos orientales que elige sentarse junto a otro alumno que también está solo. Ese muchacho solitario es Pasha (Zack Gafin), un ruso que domina poco el inglés y que vive en los Estados Unidos junto a sus padres. El joven vietnamita se presenta, su nombre es Tuan (Ivan Mok) y no duda en invitar a su nuevo amigo a su hogar. Ambos chicos entran en la casa de Tuan y allí se encuentran con sus padres: una azafata y un piloto de avión. Ellos saludan a Pasha, pero él apenas contesta. El piloto es rubio y con bigote, pero la azafata lleva facciones mucho más fáciles de identificar: se trata de Elizabeth Jennings (Russell) y su marido Philip (Rhys). De esta forma, la temporada comienza con los Jennings abocados a componer una (otra, en realidad) vida paralela en la que estudiarán a la familia de Pasha.
El joven Tuan, que simula ser el hijo adoptado del matrimonio, comienza a acercarse y entablar una amistad con el joven ruso al punto de ir junto con "sus padres" a su casa. Allí, el matrimonio protagonista habla de trivialidades hasta que el padre de Pasha revela información clave: él trabaja para el departamento de agricultura de los Estados Unidos y a ellos les cuenta qué es lo que no funciona de la Unión Soviética. Los espías se despiden, la noche termina y Tuan queda solo en la supuesta casa familiar que todos comparten. Ya llegará más adelante el momento de resolver qué hacer con Pasha y sus padres.
El dilema de Paige
Finalmente, la hija del matrimonio espía descubrió quiénes son verdaderamente sus padres. Luego de ver cómo su madre mataba a un hombre a sangre fría, Paige (Holly Taylor) conoció la verdad de la forma menos indicada. Y, ahora, la joven pareciera estar al borde del colapso nervioso, entre el miedo y el odio hacia quienes le ocultaron desde pequeña cómo era su vida. La figura de Paige, en algún punto, remite a Meadow, la hija de Tony Soprano en la recordada serie de HBO, y la evolución de la joven Jennings muestra una nueva arista en las eternas fricciones que surgen entre hijos y padres y qué sucede cuando ellos descubren que sus progenitores esconden una doble vida. Meadow, en su momento, comprendía quién era su papá y hasta parecía condonar sus pecados, pero Paige experimenta una situación absolutamente opuesta. La joven hija del matrimonio confiesa que tiene pesadillas de noche y la persigue el recuerdo del hombre al que su madre mató y su evidente fragilidad mental hasta podría ser un riesgo para el matrimonio y su misión. Por ese motivo, es la propia Elizabeth la que decide pasar un rato con ella e instruirla en el fino arte de la lucha mano a mano. Esa breve escena es una de las primeras en las que la madre se muestra tal cual es delante de su hija y que incluso sugiere que Paige podría ser o una rival a tener a cuenta o una posible aliada en su misión.
Un prodigio de la narrativa televisiva
"Amber Waves"también tuvo un cierre de lujo, otra muestra de la elevadísima calidad de esta ficción y un buen ejemplo sobre cómo cambió la forma de narrar en televisión y de qué manera las series se animan ahora a jugar con los tiempos muertos (recurso narrativo históricamente más vinculado al cine). Durante los últimos diez minutos del episodio, los Jennings y un grupo de camaradas se meten en un terreno vigilado. En ese tiempo, la acción se concentra exclusivamente en cavar un pozo y si bien obviamente no es en tiempo real, sí se extiende durante un buen tramo del episodio, momento en el que los personajes trabajan en el más sepulcral de los silencios. Se trata de una escena que demuestra lo mucho que creció la narrativa en televisión y cómo se puede desarrollar suspenso cuando el tiempo lo permite (alejándose de ese ritmo vertiginoso estilo 24). Esa escena incluso trabaja el silencio como forma de examinar y revelar la naturaleza de los personajes, y en ese sentido, es Elizabeth la gran protagonista de la secuencia, no solo porque demuestra su indudable capacidad de liderazgo, sino también porque vuelve a revelarse como la verdadera mente maestra y ejecutora de los Jennings.
De esta forma, The Americans comenzó su nueva temporada con la promesa de no disminuir su calidad, manteniéndose firme entre lo mejor que puede ofrecer el avasallador mapa de las series contemporáneas.