El próximo fin de semana volverá a disputarse una nueva edición del Clásico del Sur. Lanús y Banfield volverán a verse las caras en un partido que promete y mucho. A pesar de llegar con tres derrotas consecutivas desde la reanudación del campeonato, el Granate quiere seguir dando pelea y buscará, como objetivo principal, ingresar a la Copa Libertadores. Además, su rival llega quinto a siete del líder, por lo que es una linda chance para terminar de alejarlo de la lucha por el campeonato. "Es un lindo partido para volver a ganar y levantar el ánimo. Venimos de tres derrotas de las cuáles no podrían haber sido así. Se juegan muchas cosas, las emociones y la alegría de la gente", deslizó Román Martínez luego del entrenamiento del jueves por la mañana. Además, el ex Tigre, advirtió que "los clásicos se ganan, no se juegan" aunque expresó que "nuestra idea y filosofía de fútbol que llevamos a cabo nos va a dar más victorias que derrotas".

Las cuatro derrotas (una por Copa y tres por el torneo local) en cinco partidos disputados en el 2017 no estaba en los planes de nadie, pero Román no dramatiza ante la situación: "Estamos muy bien y confiados, más allá del partido que perdimos el domingo en el cual hicimos la mayoría de las cosas bien pero no ganamos. La confianza y la idea es la misma. Ahora hay que levantarse, no tenemos tiempo para reproches. Hay que corregir los errores y volver al triunfo". Por último, en declaraciones con ESPN, lamentó que no haya presencia de hinchas visitantes tanto en La Fortaleza, como en el estadio del Taladro, para la revancha: "Hubiera sido lindo como espectáculo. Pero sabemos como somos los argentinos, a veces es mejor prevenir".