"Una reflexión musical sobre la nocturnidad", en la voz de Nadia Szachniuk

Su nuevo disco, "Luna atrás", reúne composiciones propias y ajenas en las que conviven diferentes lenguajes al servicio de la construcción de uno nuevo.

Nadia Szachniuk

 La cantante salteña Nadia Szachniuk propone "una reflexión sobre la nocturnidad y sus climas" en su nuevo disco, "Luna atrás", que reúne composiciones propias y ajenas en las que conviven diferentes lenguajes al servicio de la construcción de uno nuevo.

Pletórico de matices, "Luna atrás" se desliza con destreza entre lo académico y lo popular en la voz de una cantante que ha sabido estudiar y macerar las formas de cada especie musical. "Soy salteña y eso significa, por ese sólo hecho, la presencia de una tradición folclórica muy fuerte, pero a la vez hay otras influencias, otros aprendizajes y otras escuchas que también se han incorporado", dijo en diálogo con Télam.

El disco, que se presentará el jueves próximo, comienza con una nana antigua de Granada, "A la nanita", y se extiende hasta "Lullaby for Hamza", de Robert Wyatt y Alfreda Benge. También Szachniuk adaptó al castellano de "Canción de cuna para un niño ansioso", de Dominic Miller  y Sting; y la "Canción de cuna para el vino", de Gustavo Leguizamón identificada, en la memoria colectiva, con la versión del Dúo Salteño.

"Vengo de esa línea de la tradición salteña, la linea del 'Cuchi', pero también tuve contacto con la formación de la lírica", puntualizó la cantante.

En "Luna atrás" también aparece la melodía con la que Claude Debussy musicalizó un poema de Paul Bourget, "Beau Soir", con letra de Szachniuk; y la exigente "Confesión del viento", de Roberto Yacomuzzi y Juan Falú.

La artista salteña encaró semejante diversidad junto a Bruno Moguilevsky (piano, piano Rhodes, sintetizadores, Hammond y coros) y Alejandro Starosielsky (guitarras), ambos integrantes del conjunto La Maderosa que completa su formación con la cantante Emilia Siede y el percusionista Pablo Favazza.
 

Soy salteña y eso significa, por ese sólo hecho, la presencia de una tradición folclórica muy fuerte, pero a la vez hay otras influencias, otros aprendizajes y otras escuchas que también se han incorporado”

"Aparecieron en ese camino canciones de cuna, nanas, canciones desveladas, que conquistaron y alumbraron mi propia noche. Este proceso de más de 15 años de búsqueda y selección es un juego en sí mismo. El disco es el resultado de un proceso hermoso, alegre y lúdico, en el que nos apoyamos en la libertad interpretativa y en la mirada poética sobre la noche", expresó la cantante.

"Me interesa esa libertad en el abordaje de la música. Me apoyo en imágenes que me inspiran una música, y luego en textos de canciones, que cuando están bien escritos, se corresponden casi mágicamente, sin explicarse", agregó.

Szachniuk estudió canto con diversos maestros y en la Carrera de Música Antigua del Conservatorio Municipal Manuel de Falla. Desde chica se inclinó por el canto lírico, coral y popular, explorando distintos estilos dentro del folclore, el jazz, músicas del mundo, música contemporánea y barroca.

En 2011 grabó su primer disco, "Vidala", junto a Eva Sola, con la participación del guitarrista y compositor Juan Falú y el percusionista Facundo Guevara. El material que ahora presenta, "Luna atrás", es su primer trabajo solista.

"Vivo una época globalizada donde influencias musicales son tan diversas que a veces no encontramos lugar donde ubicarnos si nos manejamos en antiguos compartimentos de clasificación estilística. Lo importante no es dónde me inscribo, sino, si transmito. En ese sentido, me siento hermanada con muchísimos artistas de mi generación que están atravesados por las mismas inquietudes", aclaró.

"Luna atrás" será presentado el jueves 11 en el escenario de Hasta Trilce (Maza 177), en el corazón de la capital federal, con una puesta en escena en vivo recreará el universo nocturno que invoca el disco a través de un diálogo dinámico entre canciones, textos recitados e intervenciones teatrales.

Nadia Szachniuk