Con sus videos recorre distintas países del mundo: Vietnam, Finlandia, Alemania, España, entres otros. En ellos, él es el protagonista y muestra sus experiencias exóticas con otras culturas. Se trata del español Juan José Cañas que, a sus 80 años y con casi 20 de jubilado, se convirtió en el primer abuelo youtuber con más de 10 mil seguidores.
¿Cómo llegó a convertirse en una personalidad de las redes? Todo surgió gracias a su nieta Esther, quien solía publicar videos en los que casualmente aparecía Cañas. La gente que veía las Instagram Stories empezó a preguntar por "el señor desconocido" que figuraba atrás. Hasta que un día su nieta le propuso armar un canal propio para compartir sus experiencias. "Y yo acepté", confiesa el abuelo a la publicación Verne de el País de España.
Como todas las mañanas, Juan desayuna leyendo el diario y luego se dedica a responder a los miles de seguidores que le escriben. Es que Atrapabuelo, como se llama su canal, se convirtió en un éxito indiscutido y cada vez cosecha más admiradores de todas las edades. Lo siguen en Europa, Sudamérica y América del Norte. "Me tomo el trabajo de escribirles a todos", cuenta y agrega: "Es que internet parece que te da cuerda. Yo le sigo el ritmo".
De este modo, el abuelo youtuber comparte los numerosos viajes que hace con su familia y otras vivencias únicas que considera que pueden enriquecer la vida de los espectadores. "Soy consciente de que hay gente que usa YouTube de mala manera, yo quiero darle un uso positivo", afirma. Así, se lo puede ver a Cañas remando en un lago de Vietnam, entre los canales de Venecia o probando alguna comida exótica.
Pero eso no es todo. Tal vez el video más exitoso es el que lo tiene como protagonista en la verdadera hazaña de hacerse su primer tatuaje. "No duele nada hacerse uno. Notas solo un cosquilleo porque te ponen una crema que anestesia", dice. En recuerdo a su difunta esposa es que Juan decidió tatuar en su piel la paloma de la paz. "Es el símbolo que aparece en la lápida de mi esposa, quien murió el Día de la Paz", manifiesta.
Desde que creó su canal dice que está más ocupado que nunca. No es para menos. "Tengo que atender a mis 12 nietos y 2 bisnietas de sangre, pero también a los otros 10 mil que siguen mi carrera", se sonríe. Youtube también se convirtió en el medio que lo comunica con sus nietos biológicos que, por diversas razones, también están repartidos por el mundo.
"Tengo muchos más viajes por concretar", asegura. Aún sueña con contemplar la Aurora Boreal junto a su familia y compartir con sus nietos virtuales una estadía en Torremolinos, Málaga. Fiel a su estilo divertido y entusiasta, este hombre deja un consejo para las generaciones más jóvenes: "Piensen en sus abuelos con mucho cariño. A lo mejor, algunos pasan el día sentados en una butaca viendo el televisor. Yo los invito a que los pinchen para que se rejuvenezcan con los más jóvenes de la familia".