¿Sabías que la sal marina podría ser menos saludable de lo que creías?
Un estudio sugiere que el plástico está afectando a otra materia prima humana cosechada del mar: la sal; un análisis de 16 marcas de ocho países encontró que todas, excepto una, contenían rastros de microplásticos
Toneladas de desechos son arrojadas anualmente al océano, y uno de los materiales más presentes en ellos es el plástico.
Según una investigación publicada en Scientific Reports, es muy probable que al rociar sal marina a las comidas, ésta contenga algunas partículas de este material indeseado.
Tan conocida por sus beneficios para la salud, la sal marina es aquella que se obtiene a través de la evaporación del agua del mar que se mueve ondularmente desde hace millones y millones de años, desgastando todos los minerales, y piedras que existen en el planeta.
Los investigadores tomaron como muestra 16 marcas de sal, provenientes de países que incluían a Malasia, Australia, Sudáfrica, Francia, Irán, Portugal y Nueva Zelanda. Luego de disolver las sales en agua, descubrieron rastros de micro plásticos en casi todas las marcas, excepto una.
Éstas, presentaban aproximadamente 72 partículas de contaminantes, que fueron identificados como pigmentos derivados de los plásticos.
La única sal que no estaba contaminada era la de Francia, mientras que las otras contenían entre una y 10 partículas de estas sustancia por kilogramo de sal.
Según explicaron, el bajo nivel de ingestión de estas partículas no implicaría riesgos significativos para la salud, pero es una alerta para estar atentos, ya que la misma suerte podrían correr otros alimentos con esta proveniencia como las algas y el pescado.