El gran Amadeo Carrizo cumple 91 años
El ex arquero de River Plate, uno de los mejores de la historia argentina, celebra hoy sus 91 años de edad.
El "gran Amadeo" Carrizo, el arquero de River Plate considerado "el mejor del siglo XX" en el universo "millonario", cumple hoy 91 años, pero hace mucho tiempo que está inmerso en el grandioso lote de las "leyendas" del fútbol argentino .
Nacido en la ciudad santafesina de Rufino el 12 de junio de 1926, hijo de un maquinista ferroviario de la mentada "Línea del Pacífico", iba a ser empleado de ese rubro cuando llegó la citación a River, en la primavera de 1943.
El legendario Carlos Peucelle lo tuvo en una práctica. La leyenda indica que hubo rápida sentencia: "El grandote de Rufino, Carrizo, se queda", dijo el popular "Barullo", adquisición de River en el 31 en cifra récord
De ahí lo de "los millonarios".
Amadeo se destacó en la Tercera campeona del 44. Algunos compañeros llegaron lejos: Alfredo Di Stéfano, Néstor Rossi, Antonio Báez, wen menor escala José Curti, luego integrante del cuerpo técnico de inferiores. Los otros, figuras en River primero y Millonarios de Colombia después.
La "Saeta Rubia", el "prócer" del Real Madrid en los´50 y 60, fue considerado entre los cinco mejores futbolistas del siglo XX. En el ´45 Peucelle hizo debutar a Carrizo en primera por ausencia del peruano José Soriano, capitán de "La Máquina" desde 1941 al 45. River superó a Independiente en Avellaneda 2 a 1.
Carrizo jugó 23 años entre el ´45 -titular recién en el´48- y 1968. Con 515 partidos se ubica junto a Angel Labruna y Reinaldo Merlo entre los que más encuentros disputaron con la camiseta de la "banda roja". Amadeo tuvo tres convocatorias a la selección, con suerte variada.
En el ´54, en una gira por Europa sufrió una lesión. Lo reemplazó Roque Saverio Marrapodi, bahiense, de Ferro. En el `58 Amadeo padeció la llamada "Debacle de Suecia" en el Mundial disputado después de las ausencias de la Argentina en Brasil ´50 y Suiza ´54.
Argentina sufrió derrotas ante Alemania 3-1 y la terrible "paliza" de Checoslovaquia. El fútbol de la Europa del Este -Hungría de avanzada- tenía mucho desenvolvimiento táctico y físico. Los checos ganaron 6 a 1 y Argentina fue estigmatizada. Especialmente Amadeo.
Su esposa Lydia, plateísta de River, a fines de los ´40 y siendo adolescente, suspiraba junto con otras chicas por el "pintón" del arco de River, de 1.90 de estatura. Se casaron en e l´51. Se habían conocido en Villa Urquiza en el ´49, cuando Amadeo recién era titular.
El glorioso arquero de River comentó como una película el "flechazo". Una prima de ella los presentó en una reunión social. Joven, bonita, "no estaba tan convencida de empezar a salir con un apuesto joven, futbolista, que iba camino a la fama", pensó luego, según relatos del arquero.
Amadeo Carrizo ya había jugado varios partidos en la primera de River. "No nos vimos por un tiempo", abundó el arquero de la historia, sobre lo que había ocurrido con "la piba".
Dos años más tarde, Carrizo la reconoció en una zona comercial de Villa Urquiza, en la intersección de Triunvirato y Monroe. Amadeo 'sacó del arco': "Si no estás casada, ni estás de novia, te invitó a salir y hablaré con tu padre. Quiero que seas mí esposa", lanzó sin muchas vueltas. A los tres meses estaban casados. Una película. Llevan 66 años de pareja matrimonial. Y hoy el geminiano Amadeo pasó las 9 décadas de vida