La risa contagiosa de Gru y el desenfado de los simpáticos Minions se extendieron por todo el país en el último fin de semana. Tras un junio desolador (la concurrencia de desplomó 43% respecto del mismo mes de 2016) y un primer semestre con balance discreto (el público disminuyó 7,6%), Mi villano favorito 3 hizo revivir a un mercado argentino que se encontraba moribundo.

El fin de semana anterior apenas 410.000 personas habían ido al cine. Entre el jueves último y ayer, la concurrencia alcanzó a casi un millón de espectadores: todo (o casi) gracias al efecto Mi villano favorito 3. Es que la producción animada de Illumination Studios sumó unas 750.000 entradas en cuatro días con una salida récord (525 pantallas) y una concentración también inédita en nuestro pais (76% del público total).

Así, la anterior puntera, La momia, debió conformarse con un muy lejano segundo lugar y poco más de 40.000 espectadores. El éxito de Mi villano favorito 3 -que se extendió a todo el mundo con casi 200 millones de dólares de recaudación en su primer fin de semana- no fue récord, ya que en la Semana Santa de 2015 Rápidos y furiosos 7 vendió 1.025.000 localidades. De todas maneras, la tercera entrega de las desventuras de Gru estuvo muy cerca de, por ejemplo, los 765.000 tickets cortados por otro film animado como Monsters University en junio de 2013 e incluso superó el debut de Los Minions (spinoff de la misma saga) hace dos años: 690.000 localidades en 351 pantallas.

Las cifras de Mi villano favorito 3 permiten augurar unas vacaciones de invierno (el período más fuerte del año para el negocio del cine) con salas llenas. El próximo jueves, por ejemplo, llegarán la comedia argentina Mamá se fue de viaje y Spider-Man: de regreso a casa; y una semana más tarde, Cars 3, de Disney-Pixar, entre varios otros "tanques". El boom de Mi villano favorito 3llega en el peor momento del mercado local.

En junio se vendieron apenas 3.050.000 entradas contra 5.390.000 de igual mes de 2016. Esa pérdida de 2.340.000 espectadores significó una preocupante caída del 43,4%. En el total del semestre se registraron 24,2 millones de entradas contra 26,2 millones de la primera mitad de 2016. En este caso, el descenso fue del 7,4%. El cine argentino también tendrá que levantar la puntería, ya que entre enero y junio sumó apenas 1.700.000 localidades; es decir, una cuota de mercado del 7%. Los films nacionales más vistos del semestre fueron Nieve negra (680.000), Los padecientes (390.000), Casi leyendas (160.000) y Solo se vive una vez (70.000). Con el apuntado lanzamiento de Mamá se fue de viaje y otros estrenos importantes como La cordillera, con Ricardo Darín (en agosto), seguramente mejorará de forma sustancial la floja convocatoria de esta primera mitad del año.