Mas del WTCC en la semana previa a Termas de Rio Hondo

Dos carreras muy diferentes entre sí precedieron a la de Termas de Río Hondo en Argentina. Fueron ellas las de Alemania y Portugal, disputadas en escenarios tan diversos como lo son el viejo Nürburgring y el callejero de Vila Real.

Para el cuarto fin de semana con actividad de su calendario 2017, el WTCC viajó a Alemania, buscando repetir la iniciativa tan única y especial que significa correr en la pista larga de Nürburgring, conocida como Nordschleife. 64 curvas a lo largo de una extensión irrepetible en el automovilismo actual (25,378 kilómetros) dan forma al imponente circuito enclavado en la Selva Negra donde la historia consagrara a argentinos de otras generaciones en la Fórmula 1, como Juan Manuel Fangio (1954, 1956 y 1957) y Carlos Reutemann (1975).

Norbert Michelisz fue el poleman con su Honda Civic oficial a más de 176 km/h de promedio. Seis décimas más atrás quedó Nicky Catsburg con su Volvo. El holandés vivía una jornada intensa, ya que también competía en las 24 Horas con un auto de GT. Lo mejor de la MAC3 fue de nuevo para la escuadra sueca.
Con la grilla revertida en la carrera inaugural, la primera fila era netamente sudamericana, ya que alineaba en ella a Néstor Girolami (Volvo S60) y Esteban Guerrieri (Chevrolet Cruze). Thed Björk largó muy bien y avanzó desde la sexta posición hasta convertirse en ganador tras pasar a los Citroën de Mehdi Bennani y Rob Huff, que cargaban más lastre. Guerrieri sostuvo un ritmo meritorio y llegó quinto. A Girolami se le reventó un neumático en la última de tres vueltas y se golpeó contras las defensas.

Catsburg aprovechó su buen arranque en la carrera principal, dio cuenta de Michelisz y soportó bien los embates de Huff sobre el final, apropiándose de un doble triunfo para la formación nórdica. La máquina de Néstor Girolami no pudo ser reparada a tiempo, mientras que Esteban Guerrieri concluyó octavo.

Con una multitud de aficionados siguiendo de cerca a su figura local, Tiago Monteiro, los portugueses presenciaron en la pista urbana de Vila Real la primera oportunidad en la que el Turismo Mundial implementaba una vuelta Joker en su historia, al estilo Rallycross. El trazado de 4.785 metros en esta localidad próxima a la ciudad de Porto desviaba por una rotonda para que, a partir del tercer giro en cada prueba, los participantes cumplan obligatoriamente una sola vez con una pasada por ese sector alternativo.

Norbert Michelisz fue otra vez el autor del tiempo más rápido en clasificación después de que el crédito portugués Monteiro derrapara demasiado en la última curva. Volvo Polestar ejerció repetidamente su poderío en la MAC3.

Mehdi Bennani (Citroën C-Elysée) se llevó los laureles de la carrera inaugural para África al salir mejor parado de un enredado inicio del que salió especialmente perjudicado Esteban Guerrieri, con roces por todas partes y un vehículo que en cuestión de segundos debió ingresar a boxes todo desalineado para su reparación. Néstor Girolami tampoco las tuvo a todas consigas y cayó de segundo a octavo.

Honda, de la mano de Michelisz, reforzó sus podios en suelo lusitano y se impuso en la carrera principal, haciendo que tanto el húngaro como Monteiro se ubiquen bien en el certamen como para pelearle el cetro a Thed Björk y Nicky Catsburg. Largando desde el fondo, Guerrieri trepó a octavo cuando en los compases conclusivos pasó a su coterráneo Girolami, en definitiva noveno.

Ahora, el WTCC aguarda con ansias su única visita al continente americano, el evento de Argentina en Termas (Santiago del Estero), prevista para dentro de d10 dias.