Se agrava la crisis social en Chile: ya son más de 800 los detenidos
La Policía reprimió las protestas estudiantes. Mientras la imagen pública de Piñera sigue cayendo, algunos sectores expresaron su apoyo a los manifestantes.
El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, informó que las dos protestas convocadas por estudiantes secundarios, universitarios y profesores dejaron 874 detenidos y 90 carabineros heridos. A esto se suma el incendio de uno de los locales céntricos de la multitienda La Polar -en el centro de la polémica por recalcular ilegalmente deudas de sus clientes morosos- y que fue saqueado por encapuchados.
Las marchas no estaban autorizadas y el gobierno volvió a justificar el actuar de carabineros que impidió las movilizaciones con abundante gas lacrimógeno.
La represión policial provocó el rechazo de la ciudadanía, que se solidarizó con "cacerolazos" desde los hogares, tras acoger el llamado de la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Camila Vallejo.
A las cacerolas se unieron automovilistas que hicieron sonar sus bocinas -especialmente en las comunas de Santiago y el sector oriente- en expresión de apoyo a los estudiantes que demanda desde hace dos meses educación gratuita, estatal y de calidad.
La Confederación de Estudiantes Univesitarios (Confech) entregaba una respuesta oficial al Gobierno -de rechazo- aunque en medio de las protestas emplazó al Ministro de Educación a entregar en seis días una nueva propuesta, lo que fue rechazado por el Ejecutivo que anunció enviará el proyecto al Congreso.