El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro , reaccionó con furia al cumplirse las ocho primeras horas de las 24 del paro cívico nacionalconvocado por la oposición. El primer mandatario ordenó la detención de dirigente opositores, amenazó a otros y exigió la actuación de las fuerzas gubernamentales contra manifestantes.

"He ordenado capturar a todos los terroristas en tiempo real", lanzó el presidente. Entre esos "terroristas" (así hace referencia a los opositores) está Freddy Guevara, vicepresidente del Parlamento: "Este muchacho estúpido ya tiene su celda lista. Estoy esperando la Constituyente. Terrorista imbécil". Guevara, mano derecha de Leopoldo López en Voluntad Popular, había publicado una fotografía en sus redes sociales donde se observa el éxito del paro en El Silencio, zona colindante al Palacio de Miraflores.

El Silencio, a pocas cuadras de Miraflores. Las calles desoladas también son protesta y se siente muy cerca del dictador #ParoCivicoActivo

El gobierno mantiene los comicios para elegir a más de 500 delegados de la Asamblea Nacional Constituyente para el 30 de julio (30-J), pese a los más de siete millones de votos recogidos en la consulta popular del pasado domingo.

Maduro también responsabilizó a Carlos Ocariz, uno de los coordinadores del plebiscito y alcalde del municipio caraqueño de Sucre, por los enfrentamientos ocurridos a las puertas del canal chavista Venezolana de Televisión (VTV), donde incluso fue quemada una estafeta policial.

"Un grupo de terroristas de la oposición intentó asaltar VTV. Los trabajadores y periodistas salieron al frente a defenderla. Pido a la justicia actuar inmediatamente con el alcalde Ocariz", clamó Maduro, quien ordenó la detención del dirigente de Primero Justicia, partido del gobernador Henrique Capriles y del presidente parlamentario, Julio Borges.

En cambio, en las últimas horas la Fiscalía ha hecho pública la detención de tres colectivos revolucionarios, presuntos autores del ataque a tiro limpio contra las cientos de personas que votaban el pasado domingo en Catia, barrio popular de Caracas. En esa zona, los paramilitares chavistas actúan a sus anchas ante la inacción de las fuerzas policiales. Maduro justificó el ataque acusando a la Embajada de Estados Unidos de estar detrás de los autores.

Paro y represión

Cumplido el primer tercio del paro cívico, la oposición cantaba victoria por adelantado. El seguimiento en Caracas, según observadores independientes, se movía entre el 60 y 70%: paro total en el este, éxito relativo en el centro, donde se encuentran los poderes del estado, y mayor normalidad en el oeste, todo ello salpicado por la ausencia de transporte terrestre.

En cambio, en el resto del país el seguimiento es incluso mayor en algunas ciudades y estados, como Táchira y San Cristóbal, Lara y Barquisimeto, Monagas, Zulia. Represión y enfrentamientos se suceden en los habituales puntos calientes.

"Hoy parece el primero de enero en algunas ciudades del país. La gente que sí trabaja decidió parar en protesta contra el gobierno y el fraude de la Constituyente", resumió Capriles.