Mozart, Liszt, Milhaud y Lutoslawski serán parte del repertorio de “América a dos Pianos”. Desde la organización se anticipó que se trata de una fecha singular dentro del ciclo por tratarse de “obras del repertorio clásico tradicional para la formación de dos pianos y cuyos autores son de origen europeo” y porque será protagonizado por un solo dúo y pianista invitado: el santafesino residente en Suiza, Erardo Vietti, junto a Nélida Kuster.
El concierto se concretará este jueves a las 20.30, en la Sala Mayor del Teatro Municipal “1º de Mayo”. Las entradas generales están en venta a un valor de 100 pesos, en la boletería de San Martín 2020.

Repertorio a dos pianos
En un repaso por las obras que incluyeron en el repertorio de este concierto, Kuster y Vietti señalaron que “La Sonata para dos pianos K 448 fue compuesta por Mozart en el año 1781 para una actuación que compartió con la pianista Josephine von Aurnhammer, con el que también estrenó su concierto para dos pianos. Es probable que la energía de esta música, su estilo galante, su estructura clara y bien compartimentada, su ritmo, la hayan convertido en una de las obras favoritas del llamado Efecto Mozart”. 
Con relación a “Las Reminiscencias sobre Don Juan”, de Mozart, indicaron que “es una fantasía basada en los temas de aquella ópera que el autor escribió en 1841 para piano solo y para dúo en 1877. En esta paráfrasis de gran duración e intensidad, en la que se supera el modelo en que se sucedían los temas, se produce una yuxtaposición y desarrollo de las ideas que las resignifica y realza en dramatismo y belleza”.

“Los preludios” es un poema sinfónico de Liszt, tal vez el más célebre de ellos, que fue escrito en 1848 y estrenado en Weimar en 1854, bajo la batuta del propio autor. En años posteriores Liszt publica una versión para dos pianos, que es la que se escuchará este jueves.

“Darius Milhaud estuvo residiendo dos años en Brasil, donde absorbe el color de la música sudamericana y donde bosqueja “Scaramouche (op.165)”, quizás su obra más conocida. Fue escrita en 1937 sobre borradores que databan de años anteriores, originalmente para saxofón y orquesta, presentada con gran éxito a sus amigos del grupo de los seis por su sencillez y frescura. Posteriormente publica una versión para dos pianos. El primer movimiento tiene un aire de Pasillo y el movimiento final es una vigorosa danza brasileña”, agregan. 

Finalmente, sobre el compositor polaco Witold Lutoslawski, “cuya primera producción compositiva fue de corte nacionalista”, Kuster y Vietti señalan que “las Variaciones sobre un Tema de Paganini fueron escritas originalmente para dúo en el año 1941 y luego transcriptas para piano y orquesta por el mismo autor en 1987. Esto nos indica que fue una obra apreciada por su compositor, y no es difícil entenderlo dado que la obra fue compuesta durante la Segunda Guerra Mundial, momento en que el compositor se ganaba la vida tocando en bares de Varsovia con un amigo pianista. En estos años escribió un número importantísimo de arreglos de música popular, de los que solo sobrevivieron estas variaciones luego de los bombardeos del final de la guerra”.