Consejos para optimizar el entrenamiento y no morir en el intento

¿Cansados de entrenar sin obtener resultados?

¿Cuántas veces te pasó que empezaste a entrenar y no alcanzaste a ver resultados en el tiempo deseado? Podría ser que te aburrieras antes o que no estabas seguro del enfoque. Se puede analizar algunos puntos a tener en cuenta para que esto no te vuelva a pasar:

1. Tiempo de la sesión de entrenamiento: Hoy en día, la mayoría no tiene “tiempo de sobra” por lo que es fundamental poder realizar la rutina de entrenamiento en un tiempo coherente. Siempre teniendo cuidado y estando atento de no lastimarse o sobre exigirse,debería ser suficiente con 60-90 minutos de entrenamiento.

2. Intensidad del entrenamiento: independientemente de cuál sea el objetivo, si el cuerpo no siente la necesidad de “adaptarse al estímulo”, los cambios se dan de manera menos observable. La antigua frase “si no duele no sirve” tiene un poco de lógica, para que se genere una adaptación al entrenamiento, es necesario mostrarle al cuerpo que no alcanzaron lo que hoy se tiene, y esto se logra pidiéndole UN POCO más (repito, siempre con cuidado y un correcto asesoramiento).

3. Coherencia Alimentación-Entrenamiento: Posiblemente sea el ítem más importante de todos. De nada sirve realizar un entrenamiento con el objetivo de “perder peso”, si al momento de comer las calorías son excesivas y la calidad no es adecuada. Del mismo modo, ante un entrenamiento para “aumentar masa muscular” es necesario, no sólo un entrenamiento adecuado, sino también comer “en exceso”, bajo en grasas y con una buena calidad general para así, tener los nutrientes necesarios para que el tejido muscular pueda ser desarrollado.

4. Tiempos de recuperación y paciencia: Ganar masa muscular, perder masa adiposa, ganar resistencia física (entre otros), son procesos que requieren de otros esfuerzos en la vida cotidiana además de “cumplir” con el entrenamiento y las comidas.

  1. Recuperación: De nada sirve esforzarse día a día si, cuando se empiezan a ver los resultados, aparece una lesión que impide seguir mejorando, o incluso, obliga a un retroceso. Prevenir es bastante sencillo, alcanza (en situaciones convencionales)con no sobre exigirse tanto en tiempo como en intensidad (no se sale a correr una hora si antes no se pudieron correr 30 minutos).
  2. “Paciencia” y tiempos estimados: Como se dijo anteriormente, mejorar es un proceso que depende de factores generales (ciclos de entrenamiento, intensidad,descansos, tiempo disponible, etc) y otros más específicos (como contextura ósea,un poco de predisposición genética, historial deportivo, entre otros) y, como buen proceso, tiene tiempos generales estimados. Los dos ejemplos más comunes en estimación de tiempos son:
    1. Incremento muscular: una muy buena velocidad de aumento de masa muscular ronda los 0.8-1.2 Kg por mes.
    2. Pérdida de grasa: se estima un máximo teórico de pérdida de grasa corporal de entre 80-120 g. por día (siempre hablando en condiciones no patológicas)

Por todo esto, lo ideal para obtener buenos resultados a la hora de entrenar es conocerse a uno mismo y planificar en función de los objetivos y posibilidades, que son personales e individuales en cada caso.

Imagen ilustrativa