El ganador estrella

Mariano Werner fue el triunfador del desafío de las estrellas en Termas de Río Hondo y afirmó que el trabajo en boxes con la recarga de combustible fue clave para la victoria

La buena suerte le hizo un guiño en el sorteo del sábado, ya que de entre las bolillas que podía elegir, sacó la 31 que era la mejor. El domingo partió desde esa posición y con un gran manejo, sumado a una gran detención en boxes se llevó su décima victoria en el Turismo Carretera.

“Fue un poco de suerte, si bien cuando uno está ahí dice voy por dentro y ojo que hay un auto despistado, muchas veces es saber o adivinar un poco y muchas veces salís ileso de eso que me permitió pasar la primera vuelta 15°, avanzar con precaución. Me encontré con Norberto Fontana, con Emiliano Spataro que ya venían con gran ritmo y traté de ir atrás de ellos sin tratar de desgastar el auto tanto en frenos como en tracción”, manifestó Werner tras bajar del podio en lo que fue emotivo, ya que le dedicó la victoria a Mauro Giallombardo.

Además, el entrerriano que luego de la parada en boxes estaba más tranquilo: “Cuando entro a boxes hice una gran recarga de combustible y me permitió estar más tranquilo con el auto, con el tanque más lleno el auto funcionaba mejor que con el tanque vacío. Cuando entró el auto de seguridad sabía que Christian Ledesma venía muy rápido y lo teníamos que pelear y aguantar a muerte”.

Por último, Werner, quien se tomó revancha de su casi victoria en los 1000 Kilómetros del TC, afirmó: “En el relanzamiento sabía que el “Gurí” iba a tratar de recuperar su vuelta, sabía que Christian lo iba a pasar o que Martínez no lo iba a molestar, de hecho en la segunda curva ya lo veo a Ledesma atrás mío y de ahí en más traté de hacer lo más rápido posible”.

Ole