Señores directores: Quienes suscribimos esta carta no integramos un solo “nosotros”. Empleados, estudiantes, actores, docentes, amas de casa, profesionales independientes... ciudadanos, animados por el deseo de compartir una sensación y un conjunto de reflexiones.
Más allá de las profundas diferencias con el “proyecto” o ideología que expresaba la presencia y candidatura de Miguel Torres del Sel, nos parece preocupante que tantos coterráneos, movidos seguramente por la buena intención, hayan decidido ungir como gobernante a una persona con probada falta de formación política y carente de propuestas.
Seguramente los análisis explicativos describirán en su abanico de razones:
-¿ Una fuerte oposición al kirchnerismo? ¿enojo con la dirigencia provincial por su identidad especialmente rosarina? ¿identificación popular con la figura ‘carismática‘ de un señor conocido por su buena trayectoria en el mundo del espectáculo? -¿disciplinamiento en torno de la opción reutemanista y alianza con la propuesta de Eduardo Duhalde?
-¿descontento radical con la candidatura de Antonio Bonfatti? ¿el consabido eslógan que repite... voto ‘castigo‘ a los políticos?
Aun con todas las hipótesis y por respeto a todos esos votantes y a cada uno de nosotros como integrantes de una sociedad, es que nos parece oportuna la ocasión para que en todos los niveles de gobierno (provincial, municipal y nacional) se reflexione sobre la necesidad de diálogo intersectorial, trabajo político multipartidario, garantía de representatividad y respeto para partidos menos mediáticos (que también recibieron el apoyo electoral), concientización ciudadana, políticas inclusivas que aseguren empleos y viviendas dignas, y una educación permanente y continua.
Pensar, en ese contexto, programas o propuestas que, a través de la formación sistemática o asistemática planteen pasos básicos, en la escuela y en otros ámbitos de socialización, tales como: ¿‘qué significa ser ciudadano‘, ‘cuándo tengo derechos y deberes‘, ‘qué debo conocer para participar‘, ‘cuál es el significado de las ideologías‘, ‘qué significa formarse políticamente‘, “construir un proyecto y poder fundamentarlo con propuestas y acciones” “de qué modo el sistema electoral y la justicia garantizan la representatividad de los partidos y la proyección concreta de las decisiones del electorado’?
Seguramente la democracia en su conflictividad propia, los partidos políticos en sus juegos de alianzas y rupturas, las contradicciones, logros y retrocesos, mucho han tenido que ver con este escenario, pero sentimos que es un hecho fuertemente simbólico, que no puede quedar en la anécdota.

Nos cuesta pensar que una parte importante de la sociedad apueste por un retorno a la cultura política de la ‘no política‘ y porque nos resulta preocupante, con sencillez y sin pretensiones ni calificativos, planteamos ponerlo en discusión, apostando a una lectura reflexiva de estas elecciones en los ámbitos partidarios y en los ámbitos educativos... impulsando interrogantes y desafíos para un nuevo y profundo debate ciudadano.

Alicia Talsky (12.042.460), Magdalena Benassi (6.706.108), Luciano Alonso (14.837.122), María Aurelia Villa (5.207.649), Julio De Santi (18216230), Teresa Suárez (5.490.232), Paula Busso, Italo Ronchi (6.264.549) Nurit Scaliter (12.375.454), Pascualina Di Biasio (11.555.080), Mirta Garrido (10.062.607), Paula Benavídez (23.029.856), Carina Marti (23.258.652), Analía Molinari (28.925.938), Marta Defeis, Liliana Ameztoy (10.715.029), Lucina Farioli (14.826.006), Ana Ronchi (30.165.963), Norberto Sola (24.627.294), Silvia Dejon (23.814.704), Soledad María Rodríguez, Marina Benzi (25.459.429), Gabriela Feroglio (27891704), María Susana Gallo (17.205.622), Pablo Ronchi (31.058.724).