Madrugada de terror para un farmacéutico de Candioti

Delincuentes lo interceptaron en la puerta de su casa, le robaron dinero de su domicilio y lo privaron de su libertad mientras lo llevaban a su local para que les diera la recaudación. Luego se llevaron su auto, que horas después fue hallado quemado en esta capital.

El comienzo de este martes no fue como el de cualquier otro día para Alejandro Ferrarassi (31), oriundo de Candioti, una pequeña localidad situada a sólo 32 kilómetros de la capital santafesina. Hasta las 2:00 compartió una reunión con amigos en un bar. Al llegar a su casa no lo esperaban momentos igual de gratos. 

Cuando se disponía a ingresar fue emboscado por dos o tres delincuentes, uno de los cuales lo obligó a entrar en la vivienda a punta de pistola. Una vez adentro le sustrajeron 500 pesos. 

Como esa suma no los dejó conformes, los delincuentes lo maniataron y le vendaron los ojos. En esas condiciones lo privaron de su libertad, con el objetivo de conducirlo a la farmacia que es de su propiedad para obtener más dinero.  Pero a su arribo, un patrullero policial pasó por el lugar e hizo desistir a los asaltantes, que entonces escaparon por la ruta nacional 11 con el automóvil Nissan Tiida de Ferrarassi. En su retirada dejaron a su víctima en la Circunvalación Oeste, a la altura de la casabomba Nº5. 

Caminando, el infortunado farmacéutico  se dirigió a Avenida Blas Parera y Gorostiaga, donde se encuentra la base 3ª del comando radioeléctrico. 

Incinerado
Horas después del violento episodio, alrededor de las 11, personal de Orden Público y de Cuerpos halló el vehículo de Ferrarassi prendido fuego. Fue en Regimiento 12 de Infantería al 6900 –barrio Santo Domingo- de Santa Fe. Los daños eran totales. 
 

Así quedó el automóvil de Ferrarassi.